Te levantas a las 6 de la mañana, todavía somnoliento, pero decidido a iniciar tu día con una sesión de ejercicio. Otros prefieren esperar hasta la tarde, cuando el cuerpo ya ha alcanzado su temperatura máxima. Y luego están los noctámbulos que sienten la necesidad de liberar energía justo antes de dormir.
Pero, ¿qué dice la ciencia sobre el mejor momento para ejercitarse? Aquí te revelamos cuál es el horario más efectivo para tu rutina, según los especialistas.
La revista Healthline destaca que hacer ejercicio por la mañana tiene varios beneficios. Según un estudio publicado en Medicine and Science in Sports and Exercise, ejercitarse temprano puede reducir la atracción por alimentos no saludables, ya que las personas que se ejercitan en la mañana tienden a estar menos distraídas por imágenes de comida. Además, la actividad física matutina aumenta el metabolismo, lo que permite seguir quemando calorías durante todo el día.
Por otro lado, el ejercicio vespertino y nocturno también tiene sus ventajas. La revista de salud cita estudios que indican que el rendimiento físico alcanza su punto máximo por la tarde. Entre las 2 p.m. y 6 p.m., la temperatura corporal es más alta, lo que optimiza la función muscular y la resistencia. Además, la toma de oxígeno es más eficiente en la tarde, permitiendo una mejor utilización de los recursos energéticos del cuerpo. Incluso, algunas investigaciones señalan que los ejercicios realizados en la tarde pueden mejorar la calidad del sueño.
La respuesta a esta pregunta no es tan sencilla. Los estudios aseguran que no hay un horario universalmente mejor; todo depende de tus objetivos personales y de cómo se adapta el ejercicio a tu rutina diaria. Si lo que buscas es perder peso, el ejercicio en ayunas por la mañana podría ser beneficioso, ya que algunos estudios sugieren que aumenta la quema de grasa en comparación con el ejercicio realizado en otros momentos del día.
Sin embargo, si tu objetivo es mejorar el rendimiento deportivo, el final de la tarde podría ser más efectivo, dado que el cuerpo está en su punto máximo de eficiencia física.
Independientemente de la hora, los beneficios de la actividad física son innegables. Según la Mayo Clinic , entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, el ejercicio regular ayuda a controlar el peso, combate diversas condiciones de salud como la hipertensión y la diabetes tipo 2, mejora el estado de ánimo, aumenta la energía y favorece un sueño de mayor calidad. Además, reduce el riesgo de sufrir caídas y ciertos tipos de cáncer, como el de colon y el de mama, y puede mejorar la función cognitiva.
Así que el mejor horario para hacer ejercicio es el que mejor se adapte a tu estilo de vida y te permita ser constante. Ya sea en la mañana, tarde o noche, lo importante es mantenerse activo y disfrutar de los numerosos beneficios que la actividad física ofrece para tu salud.
