Un equipo de investigadores internacionales trabajan en desarrollar una tela inteligente capaz de generar energía a través del movimiento y los cambios de temperatura, y que servirá para alimentar sistemas de comunicación y monitoreo de salud. Entre ellos, participan miembros del Tecnológico de Monterrey.
Tec de Monterrey busca crear tela que genere energía a partir del movimiento
El Tecnológico de Monterrey participa en un proyecto internacional para crear tela que genere energía eléctrica a partir del movimiento, y que será usada por la Armada de EU.
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Dual Envelope Multifunctional Fabric es el nombre del proyecto de investigación en el que participan investigadores del del Tec de Monterrey, el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y la Universidad Federal de Ceará en Brasil; con el objetivo de crear un material textil con base en polietileno.
Este material combina efectos piezoeléctricos y termoeléctricos que generan cargas eléctricas a través de las deformaciones y las variaciones térmicas. Los científicos anticipan que esta tecnología será utilizada en trajes de neopreno para el personal de la Armada de Estados Unidos, quienes también financian el proyecto, a través de la Oficina de Investigación Naval Global (ONRG).
La investigación fue elegida, junto a otras cinco, por la Armada en el ONR Global X Challenge, en la categoría de Textiles multifuncionales para plataformas de supervivencia. De acuerdo con la página de Oportunidad de Subversión del Desafío Global-X 2023 , el techo del premio asciende a 1 millón de dólares.
Una tela sustentable que genera energía
Luis Marcelo Lozano, investigador del Tec, junto con sus demás compañeros, desarrollan un prototipo de textil enfocado en las necesidades de un buzo como usuario principal, pero que pueda tener otras aplicaciones asociadas a ambientes de supervivencia.
“Buscamos generar multifuncionalidad con dos tipos de componentes: uno pasivo con las características del PE [polietileno] para dar protección ante las presiones en altas profundidades, con el agua misma y con termorregulación para las bajas temperaturas y, también, uno activo con fibras piezoeléctricas y termoeléctricas para generar electricidad”, explicó en entrevista para TecScience.
El textil estaría conformado por dos capas de fibras de polietileno, unidas por un espaciador, similar a un hueco, y entrelazadas con otras a las que se les puede incrustar otros materiales para generar energía. El proyecto puede brindar mejores resultados térmicos, de absorción del agua y resistencia a manchas que otros materiales de la industria de la moda, como el algodón.
El desarrollo de la tela va más allá que cualquier otra, ya que requiere una ingeniería específica que le permita ser multifuncional. El componente activo del material, que aún se investiga, permitiría generar electricidad necesaria para alimentar los sistemas de comunicación, monitoreo de salud y termorregulación activa del traje, entre otras funciones.
Las fibras piezoeléctricas permiten generar electricidad mientras el buzo se mueva, mientras otras fibras, las termoeléctricas, lograrían producir energía a partir de la diferencia de temperatura entre el buzo y el agua.Por su parte, el componente pasivo no requiere ninguna fuente de energía para operar, señala la publicación.
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