La desparasitación es vital para mantener un buen estado de salud de un perro o gato y de los dueños, ya que no solo protege a los animales contra las molestias de tener parásitos externos o internos, también previene de enfermedades que son capaces de afectar a las personas.
Y para que sea efectiva, debe realizarse con la periodicidad adecuada, que no siempre se cumple.
“Estamos acostumbrados a únicamente hacer algo cuando vemos pulgas o cuando vemos las garrapatas (...) si yo no le veo pulgas a mi perro o a mi gato, no tengo ninguna necesidad de hacer absolutamente nada, y esa es una visión completamente equivocada”, mencionó Alejandro Sánchez, Director de Scientific Marketing Affairs de la Unidad de Animales de Compañía de MSD Salud Animal en México.
Alejandro Sánchez, quien es médico veterinario por la UNAM, explicó que parásitos externos como las pulgas y garrapatas son muy pequeños y pueden no ser perceptibles hasta que exista una infestación sobre el pelo del perro. Esta situación no es tan frecuente, pero la existencia de pocos insectos ya pueden afectar a los canes.
“El problema ni siquiera es la cantidad de sangre que puedan comer (...), son las enfermedades que transmiten cuando están comiendo y son enfermedades graves para los perros”.
El problema se agrava debido a que las enfermedades también son contagiosas para los humanos (enfermedades zoonóticas). Si un insecto pica a una persona, también puede contraerla.
El especialista enlistó las siguientes: fiebre manchada, ehrlichiosis o la enfermedad de Lyme, todas transmitidas por la picadura de una garrapata infectada.Otras enfermedades son borreliosis, causada por las heces de las pulgas, o dipilidiasis, causada por ingerir pulgas.
Hay enfermedades pueden ser graves y mortales, o que dejan repercusiones de por vida, como la fiebre manchada, que provoca dolor de cabeza intenso, escalofríos, postración, mialgias y fiebre entre 39.5 a 40 grados centígrados. Además puede causar delirios y coma, y en casos graves, hipotensión arterial, neumonía, insuficiencia circulatoria y pueden sufrir de un paro cardiaco.
Alejandro Sánchez explicó que los animales deben estar protegidos siempre contra los parásitos y no esperar a que presenten un síntoma o signo de tener alguno. La periodicidad dependerá del tipo de desparasitante que se escoja, hay por un mes, por tres meses o incluso por un año, como el Bravecto 365, una innovación de MSD Salud Animal que protege a los perros mediante una inyección.
La preferencia quedará en cada dueño, así como la responsabilidad de aplicar la siguiente desparasitación de los perros.
En caso de que haya infestación, además de dar tratamiento al can, es necesario realizar una fumigación en el hogar, ya que pueden alojarse y reproducirse en sitios de la casa como un sillón, la cama o un librero.
El médico indicó la importancia de la prevención, ya que en caso de complicarse, los costos del cuidado de los animales pueden ser bastante elevados, que pueden oscilar 8,000 a 12,00 mil pesos en el hospital veterinario.
"La prevención siempre es mucho más barata que enfrentar hospitalizaciones y tratamientos cuando el animal ya está enfermo."
El especialista explicó que existen zonas del cuerpo de los perros en las que suelen alojarse los parásitos externos, y que no son tan revisadas como sucede en el lomo. Por ello, recomendó prestar atención en las siguientes áreas:
Además, agregó que "Mantener una constante visita al veterinario es clave para determinar las necesidades específicas de salud y desparasitación del animal."
Algunos consejos que comparte la American Veterinary Medical Association para proteger a los perros y gatos contra los parásitos externos son:
