Alemania usó tácticas motivacionales inspiradas en el 'orgullo aficionado'
Animadas celebraciones estallaron en Berlín y en toda Alemania después de que la selección germana de futbol goleó 4-0 a Argentina y avanzó a las semifinales del Mundial de Sudáfrica, dando más estímulos a los jugadores de cara al futuro.
Más de 350.000 aficionados que miraban pantallas ubicadas en la vía pública de Berlín estallaron en júbilo con cada uno de los cuatro goles alemanes y celebraron tras el pitazo final con el lugar que su equipo obtuvo entre los cuatro mejores del mundo como lo había hecho anteriormente en el 2002 y 2006.
El técnico alemán, Joachim Löw, rindió tributo a la multitud de seguidores en casa y reveló tras el partido que usó una grabación con aficionados alentando durante la victoria 4-1 en octavos de final sobre Inglaterra como un arma de motivación justo antes del partido con Argentina.
"Justo antes del partido vimos juntos un video con algunas escenas de los fanáticos celebrando en Alemania", dijo Löw.
"Lo mostramos al equipo justo antes de salir para el partido de Argentina. Era un filme de varias calles con aficionados que mostraba a los fanáticos en Alemania celebrando durante el partido de Alemania. Creo que esa es la mejor motivación posible para nuestro equipo", aseguró el entrenador.
Demostraciones públicas
Desechando su normal reserva en demostraciones públicas de patriotismo, los aficionados alemanes saltaron de alegría envueltos en banderas negras, rojas y doradas.
En Berlín completos extraños se abrazaban emocionados a lo largo de sus calles repletas de gente.
La enorme multitud vio el partido bajo un cielo azul y temperaturas que alcanzaron los 38 grados celsius. Otras decenas de miles vieron el encuentro en pantallas gigantes instaladas en plazas, piscinas públicas y orillas de lagos a lo largo y ancho del país.
"Se me puso la piel de gallina mirando esto", dijo un aficionado en un lugar de reunión pública instalado entre la Puerta de Brandeburgo y la Columna de la Victoria en el corazón del centro cívico de Berlín.
"Todos aquí se aman, todos aman a Alemania. Es una gran sensación. Vamos a ganar la Copa del Mundo de nuevo", agregó.
Caravanas espontáneas de autos se formaron en pueblos y ciudades a lo largo y ancho del país, con los alemanes festejando a pesar de las recientes advertencias de las autoridades de que tocar la bocina y celebrar arriba de los autos no está permitido por la ley.
La canciller alemana, Angela Merkel, también fue arrastrada por la alegría tras la victoria sobre Argentina. Ella había pronosticado un triunfo por 2-1 y olvidó su estilo habitualmente reservado tras el encuentro.
"Es incontenible, es un sueño, simplemente un sueño", dijo Merkel en una entrevista con la cadena German TV.
"Soy una persona cauta. No me comencé a sentir bien sino hasta que fuimos adelante 4-0. Creo que Alemania ha logrado algo demasiado maravilloso", añadió.
El delantero alemán Thomas Müller también rindió tributo a los hinchas en casa. "Creo que Alemania está temblando en este momento y nosotros también. Es demente", señaló.
