“¡Qué hable, qué hable!”, gritaba la multitud reunida frente al escenario instalado especialmente para la visita de la selección de España al Palacio de la Moncloa. Hablaba el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, pero la gente quería escuchar unas palabras del hombre que anotó : Andrés Iniesta.
Cuando finalmente se acercó al micrófono, el jugador dijo en un brevísimo discurso: “Esta copita es de todos”.
Antes, agradeció. “Simplemente daros las gracias por este recibimiento que nos habéis dado, y me siento muy orgulloso de formar parte de este equipo”. La gente le respondió con una ovación.
Fue Zapatero el primero en pedirle a Iniesta que se acercara al micrófono. El presidente de gobierno dijo: “Quiero hacer mención especial a quien ayer metiendo el gol de la victoria se acordó de un amigo que ya no está entre nosotros…Iniesta". Zapatero se refería al fallecido .
El mandatario agradeció la actuación de los 23 jugares en Sudáfrica y dijo que ahora van a trabajar “por la siguiente Copa del Mundo”.
El portero, Iker Casillas, también tomó el micrófono. En su turno, y con dificultad porque los gritos de los fanáticos difícilmente los dejaba hablar, dijo que “el nombre de España va a estar durante cuatro años en lo más alto del mundo”.
El director técnico, Vicente del Bosque, –quien fue el primero en hablar– agradeció a todos, “desde el club más humilde hasta el más grande” del país.
La parada de la selección de España en el Palacio de la Moncloa siguió a .
En su itinerario, el siguiente paso es un recorrido por las principales de Madrid para saludar a miles de fanáticos.