¿Dónde están los golfistas afroamericanos de Estados Unidos?
Cuando el nombre de Tiger Woods se volvió conocido , se esperaba que su éxito rompiera las barreras culturales y raciales en el golf en una generación de estrellas afroamericanas. Pero la revolución aún no se ha materializado.
Tras 14 años de carrera profesional de Woods, existen menos jugadores afroamericanos en el PGA Tour que en 1976, cuando el ex número uno del mundo apenas caminaba y el Agusta National aún no admitía a su primer jugador negro.
Así que cuando el graduado de la Universidad de Stanford, Joseph Bramlett, se convirtió en el primer afroamericano en 25 años en superar las eliminatorias escolares del PGA Tour la semana pasada, su éxito resaltó el fracaso del golf en capitalizar el fenómeno Woods.
“El asunto es el patrocinio y el financiamiento”, dijo Debert Cook, editora de African America Golfer's Digest.
“Los jugadores afroamericanos van bien en la escuela y en la universidad, en donde las becas los ayudan a apoyar el desarrollo de su juego, pero cuando emergen al otro lado, simplemente no tienen los recursos para practicar”, dijo Cook.
“Es extremadamente difícil financiar prácticas en las instalaciones regulares del PGA Tour sin un patrocinio serio que te respalde. Y ese patrocinio simplemente no existe para los jugadores afroamericanos”.
Bramlett, de 22 años, y Woods serán los únicos dos jugadores de ascendencia negra entre aproximadamente 250 competidores en la próxima temporada del PGA Tour, una alarmante estadística dada la existencia de Tiger, y el hecho de que existieron varios afroamericanos en el circuito en 1976.
Los jefes del PGA Tour no han dejado que el asunto los supere. En 1997, el mismo año en que Woods se convirtió en el primer afroamericano en ganar el Masters, el tour ha estado altamente involucrado en lanzar el programa 'The first tee”, una organización sin fines de lucro que busca "proveer a los jóvenes de todos los orígenes una oportunidad para desarrollar valores que mejoren su vida, como confianza, perseverancia y juicio a través del golf y la educación del carácter”.
Ty Votaw, el vicepresidente ejecutivo de comunicaciones y asuntos internacionales del PGA Tour, dijo que el programa ha sido un éxito.
“The First Tee, que está más enfocado en el desarrollo de habilidades para la vida que en el desarrollo del jugador, ha hecho un trabajo maravilloso al introducir al juego a millones de jóvenes a través de sus programas individuales de Capítulos y Golf en Escuelas”, dijo Votaw.
“Muchos de estos jóvenes son minorías. El PGA Tour y nuestros torneos siguen apoyando The First Tee, otorgando significativas donaciones financieras, así como proveyendo de clínicas y admisiones gratuitas a los torneos.
El PGA Tour también cuenta con un programa de internado, ahora en su vigésimo año, que ha ayudado a introducir a cerca de 500 estudiantes de colegios universitarios. Votaw dijo que la mayoría de los participantes pertenecen a minorías, y aproximadamente 20% logran “puestos de tiempo completo en el negocio del golf y el deporte”.
Pero la editora de revistas Cook sostiene que el PGA Tour podría hacer más para incrementar el número de jugadores afroamericanos compitiendo en el nivel más alto .
“Josep Bramlett se benefició de estar en Stanford y de moverse en esos círculos, pero lo que necesitamos es un sistema de apoyo para los jugadores que se gradúan de universidades y colegios históricamente negros”, dijo.
“Por el momento, los jugadores negros son forzados a escribir a celebridades millonarias o empresarios afroamericanos para obtener financiamiento, pero nadie sabe quiénes son. Así que nunca van a conseguirlo de esa manera.
“Hay jugadores excepcionales que están listos para jugar y sólo necesitan el apoyo financiero para impulsar sus carreras. Si eso sucediera veríamos a otros 10 o 12 jugadores negros en el PGA Tour en los próximos tres o cuatro años”.
Votaw dijo que el PGA Tour estaría “emocionado” de contar con más miembros afroamericanos.
“El PGA Tour se ha vuelto mucho más internacional en su composición en la década pasada – 77 jugadores internacionales de 21 países en 2010”, dijo Votaw.
“Así que, aunque había quizás media docena de miembros afroamericanos en el PGA Tour en 1976, ahora existe un rango más amplio de etnicidad en el Tour que hace 25 años.
Votaw añadió que el PGA Tour se mantiene enfocado en obtener una competencia de élite entre los mejores jugadores.
“Es importante reconocer que el principio del PGA Tour es el de una verdadera meritocracia, los jugadores ganan y mantienen su membresía basada únicamente en su habilidad de competir”, dijo Votaw.
Además de ser afroamericanos hijos de padres de razas mezcladas, Bramlett y Woods se graduaron de Stanford y los dos juegan al golf desde los 3 años de edad.
Realizaron rondas de práctica juntos en Pebble Beach antes del US Open de este año, y Bramlett compitió en el World Junior Golf Challenge, en un equipo patrocinado por la Fundación Tiger Woods.
Woods envió un mensaje a Bramlett a través de Twitter poco después de que consiguió su tarjeta del PGA Tour: “Felicidades a Joe Bramlett por pasar las eliminatorias escolares. Un logro increíble considerando que estuvo fuera todo un año por una lesión en la muñeca. No puedo esperar para jugar con él la próxima temporada”.