El Cáucaso ruso es descartado como sede del Mundial 2018 por inseguridad
La región del Cáucaso ha sido descartada como sede del Mundial de futbol que se disputará en Rusia en 2018 por motivos de seguridad, aseguró Alexandr Jloponin, jefe del distrito federal del Cáucaso Norte ruso, el sábado.
"La cuestión de la seguridad es decisiva en la responsabilidad de Rusia ante un torneo internacional. Y, en estos momentos, no podemos decir que hayamos cerrado el tema de la garantía de la seguridad en la región", señaló Jloponin, según las agencias rusas.
Jloponin recordó que "existen muchos que se oponen a que Rusia acoja la Copa Mundial de futbol" , por lo que Rusia "no puede arriesgar".
"Cada ciudad grande, cada capital regional aspira y está interesada en acoger alguna fase del Mundial", dijo.
El presidente de Chechenia y también presidente del equipo Térek Grozni, Ramzán Kadírov, ha sido el mayor líder de la disputa de tener algún partido mundialista en el territorio, situado entre los mares Negro y Caspio.
Kadírov mantiene que la guerrilla separatista e islamista ha sido prácticamente aniquilada, y que la región necesita albergar el Mundial para sacarla de su atraso secular.
No obstante, ningún estadio de la región cuenta con aforo para 40,000 espectadores, el mínimo exigido por la FIFA para acoger partidos internacionales.
El Térek, que contrató esta semana al holandés Ruud Gullit como entrenador, inaugurará en marzo próximo un nuevo estadio con capacidad para unos 30,000 espectadores.
La final del Mundial se disputará en el estadio olímpico Luzhnikí de Moscú, que cuenta con 90,000 asientos y una de las semifinales tendrá como escenario el nuevo estadio del Zenit San Petersburgo, con una capacidad para 68,000 personas.
El resto de partidos se disputará en la parte europea del país, siendo la capital de la región de los Urales, Yekaterimburgo, la sede más oriental, y el enclave báltico de Kaliningrado, la más occidental.
San Petersburgo acogerá el domingo una ceremonia oficial en la que Rusia recibirá oficialmente el estatus de país sede del Mundial de futbol, en la que participará el presidente de la FIFA, Joseph Blatter.