El Super Bowl rompe todas las marcas de audiencia en televisión
El partido de la edición 45 del Super Bowl, la final de la liga de futbol americano que disputaron los Empacadores de Green Bay y los Acereros de Pittsburgh el domingo , batió todas las marcas de audiencia de televisión, según los primeros datos ofrecidos por la compañía especializada Nielsen Co.
El duelo, que ganaron los Empacadores por 31-25 , superó en los mercados importantes de las grandes ciudades al 47.9 de rating y un 71% de audiencia que se había dado en el Super Bowl XXI de 1987, cuando los Gigantes de Nueva York ganaron 39-20 a los Broncos de Denver.
Lo anterior significa que el partido disputado en el Cowboys Stadium y trasmitido por la cadena de televisión Fox, fue visto en más de dos tercios de los aparatos que estaban encendidos en el momento que se disputaba el encuentro.
Aunque todavía Nielsen Co. no tiene los datos definitivos, las mediciones preliminares muestran que se superaron también los 106 millones de espectadores que el año pasado vieron el partido entre los Saints de Nueva Orleans y los Colts de Indianápolis.
El año pasado también se dio la audiencia de 153 millones de telespectadores que en determinados momentos sintonizaron la trasmisión del partido, aunque no lo vieron completo.
El encuentro de 2010, que ganaron los Saints por 31-17, ya había sido el programa más visto en la historia de la televisión en Estados Unidos, también ofrecido por la cadena Fox.
Nielsen no tenía disponible de inmediato un estimado del total de personas que sintonizaron el juego el domingo, pero una medición hecha durante la noche en 56 de los mercados más grandes de medios, demostró que el Super Bowl de este año tuvo un índice de audiencia de 3% más alto que el del 2010.
También supera a la marca del Super Bowl de 1982, una época en la que eran muchos menos los canales de televisión, con sólo tres cadenas nacionales que competían por la atención de los televidentes.
El incremento en la audiencia de televisión para ver el Super Bowl tuvo como aliados el mal tiempo reinante en todo el Medio Oeste y que el partido se disputó en el área de Dallas-Fort Worth, que es un mercado importante.
Pero sobre todo, que el partido lo jugaron dos de los equipos históricos de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), el marcador fue siempre igualado y no se decidió el ganador hasta el último minuto.
Como era de esperar, el área de Pittsburgh y Milwaukee generaron los mayores índices de audiencia de televisión, ambos con un 59.7 de rating.
Porcentaje sólo superado por el 63 que registró el área de Chicago en el Super Bowl XX (1986) cuando el equipo local de los Bears ganó por paliza de 46-10 a los Patriotas de Nueva Inglaterra.
El área de Dallas-Fort Worth también dejó un 53.7 de 'rating' y el 80% de participación de audiencia, la segunda mejor audiencia para una sede del Super Bowl, desde que se dio el 58.9 y el 77, respectivamente, en la sede Jacksonville (Florida), en el 2005.
