Tras el desastre, las estrellas japonesas del tenis hablan del terremoto
Se supone que tu cumpleaños 21 debería ser una celebración de dicha, el cambio hacia una nueva y emocionante etapa de tu vida, pero para Ayumi Morita no fue así.
Mientras los mejores tenistas del mundo estaban reunidos en el desierto de California para un torneo de primer nivel masculino y femenino en Indian Wells, el desastre azotaba el otro lado del mundo.
Un terremoto de magnitud de 9 grados en Japón, que causó un tsunami y la devastación en la nación isla, cobró la vida de más de 13,000 personas y aún hay 14,000 desaparecidas.
El 11 de marzo también fue el día en que Morita cumplió 21 años, y ella estaba muy lejos de su madre Hiromi, de su padre Tomohiro, y de su hermano Kazuhiro.
“Fue impactante para mí. Quedé conmovida por la amabilidad que me mostró todo el mundo, todos están ayudando a mi país. Estoy impresionada”, dijo a CNN:
“Después del terremoto cayó el sistema telefónico, por lo que fue difícil contactar a mi familia. Tuve mucho miedo hasta que pude escuchar de mi madre que todos estaban bien. Pero fue muy difícil escuchar las noticias. Ha sido devastador ver las noticias y ver cómo sufre mi país. Espero que las cosas empiecen a mejorar pronto”.
Nació en la ciudad de Ota, a 80 kilómetros al noroeste de la capital, Tokio. Morita ha trabajado para crecer en los rankings desde que hizo su debut en el Tour WTA en 2005.
Ahora es la número 53, y enfrenta los mismos problemas que muchos de sus compatriotas estrellas: cómo mantener la concentración en medio de tal tragedia.
“Cuando escuché la noticia fue un momento muy duro. Mi mamá dice que Japón está en una situación muy difícil. Ha sido complicado, pero mi mamá me dijo que me concentrara en el tenis, y eso es todo lo que puedo hacer”.
Morita también intenta retribuir algo a Japón. Así como usa una banda de la Cruz Roja durante sus partidos “para enviar un mensaje de mi aprecio”, también donó artículos a la subasta de caridad en línea realizada por el tenista masculino número uno, Kei Nishikori.
La veterana Kimiko Date-Krumm, también contribuyó con algunos artículos donados, mientras que el torneo WTA de Tokio organizó otra subasta en línea para recaudar fondos para las víctimas del terremoto.
El desastre ha dificultado a los jugadores japoneses encontrar tiempo para regresar a casa y estar con sus seres queridos. El evento de Indian Wells fue seguido por otro torneo de dos semanas, en Miami, también presentando a las grandes personalidades del mundo, y ahora el circuito del tenis cambió casi de inmediato a Europa para el inicio de la temporada de canchas de arcilla.
Date-Krumm, disfrutando de su segunda carrera después de terminar un retiro de 12 años en 2008, escuchó la noticia del terremoto cuando estaba en la fiesta del pre-torneo en Indian Wells.
“Regresé a mi habitación y prendí el televisor, y revisé mi correo. Mi manager envió un correo electrónico desde Tokio diciendo que había ocurrido un terrible terremoto y después vi en el televisor que el tsunami ya había comenzado. Fue tan rápido. Estaba sorprendida e impresionada”, dijo a CNN.
Su padre, Juichi, de 40 años de edad murió en 2007, pero su madre Masako y sus hermanos Ryusuke y Junko estaban en Japón. “Intenté llamar a mi madre y estaba bien, y mi hermano me envió un correo y estaba atrapado en su compañía, no podía regresar a casa pero su familia estaba bien”, dijo Date-Krumm, quien tiene bases en Tokio y en Europa con su esposo, el piloto de carreras alemán Michael Krumm.
“También mi hermana, ella estaba recogiendo a sus dos hijos e iba de regreso a casa, pero no tenía electricidad. Pero al siguiente día estaban bien en comparación con otros niños, que tenían a sus familias separadas y a gente muerta”.
El año pasado Date-Krumm se volvió la jugadora más grande en vencer a una mujer entre las mejores 10, y se quedó cerca de convertirse en la mujer más grande en ganar un evento de la WTA cuando perdió la final en Osaka.
La ex número 4 del mundo ahora está en la posición 56 como la segunda mejor jugadora japonesa, después de Morita, y está determinada a seguir jugando el deporte que tanto disfruta.
“El tenis es un deporte fantástico y yo aún estoy en forma. No sé cuando tiempo más voy a seguir, pero amo los deportes, así que es posible que lo siga haciendo”, dijo.
“Nunca pienso en los rankings, sólo disfruto el tenis. Es un gran reto para mí. Claro que no quiero perder, no me gusta perder. Es más importante que la vida sea un reto”, concluyó.