Enríquez: la 'espigada chiva' que se colocó entre los mejores del mundo
El club Chivas de Guadalajara tiene el honor de presumir que tiene entre sus filas a dos jóvenes que han sido reconocidos en los Mundiales que la FIFA ha organizado este año: Carlos Fierro, campeón con la Selección Mexicana Sub-17, y ahora Jorge Enríquez, capitán de la Sub-20.
Luego de que México cerrara su participación en el Mundial Sub-20 de Colombia este sábado en el tercer lugar , el joven nacido en Mexicali, Baja California se colocó como uno de los tres mejores jugadores del torneo, al recibir el balón de bronce, después del brasileño Henrique, y el portugués Nelson Oliveira, balón de oro y plata respectivamente.
Aunque sólo se adjudicó un tanto en la Copa Mundial en el mismo partido por la tercera plaza ante los franceses, con sus 1.87 metros de estatura, el Chatón Enríquez lideró al equipo tricolor desde la mediacancha para ir contra todas las adversidades y convertirse en una de las sorpresas del certamen, como lo fue el triunfo sobre los anfitriones en cuartos de final.
El número 14 de las Chivas, quien este año cumplió 20 años y proviene de las fuerzas básicas, debutó hace poco tiempo el primer equipo rojiblanco. Fue en un encuentro con el club Pachuca, el 17 de febrero de 2010, que Enríquez daba el campanazo de inicio a su carrera profesional, en el mismo torneo en que Javier Chicharito Hernández llamó la atención del Manchester United.
Ese mismo año, Enríquez despuntó al ser uno de los pilares del Rebaño Sagrado que participó en la Copa Libertadores, donde las Chivas llegaron a la final contra el Internacional de Porto Alegre, la cual el ahora tercer mejor jugador de la Sub-20 en el mundo no pudo disputar por una lesión.
Con la playera tricolor, Enríquez formó parte de la Selección Mexicana Sub-17 que compitió en la Copa del Mundo de Nigeria 2009 , en esa ocasión aquel equipo no logró la gloria que cuatro años antes la juvenil había alcanzado.
El club tapaíto ha destacado del jugador "su eficacia en la recuperación del balón" y el estilo "inusual" de recorrer la cancha con la enorme zancada del "espigado" jugador.
"Es magnífico el poder ser uno de los mejores del Mundial, todo jugador sueña con eso, pero la verdad se lo dedico a todo mi equipo, porque sin ellos no sería posible", aseguró este domingo el mediocampista.
En el triunfo mexicano de este sábado 3-1 sobre Francia en el estadio El Campín de Bogotá, el Chatón Enríquez tuvo una gran motivación en las tribunas para marcar su único gol: sus padres.
"Lloré como un niño, porque mis padres son todo el apoyo", informó la agencia Notimex.
El club rojiblanco destacó en su sitio web que con el reconocimiento a Enríquez se deja constancia "del gran trabajo en fuerzas básicas que se ha desarrollado en los últimos años en beneficio del balompié nacional".