Un acuerdo entre clubes y futbolistas permite reanudar el futbol italiano
La Asociación de Futbolistas Italianos (AIC) y los clubes de la Primera División llegaron a un acuerdo sobre el convenio colectivo de los jugadores, con lo que el próximo fin de semana arrancará el campeonato con los partidos de la segunda jornada.
El acuerdo, firmado a poco después del mediodía del lunes, será válido hasta el 30 de junio de 2012, según medios italianos.
La renovación del convenio colectivo era la exigencia que habían puesto los jugadores para regresar a los terrenos de juego y la falta de acuerdo entre las partes había llevado a la convocatoria de una huelga que impidió disputar la primera jornada los días 27 y 28 de agosto .
En la firma del acuerdo participaron el presidente de la Liga Serie A, Maurizio Baretta, y el presidente de la AIC, Damiano Tommasi, quien a la salida de la reunión confirmó a los medios que los jugadores disputarán los partidos relativos a la segunda jornada el próximo fin de semana.
Tommasi explicó que no se trata de un "acuerdo-puente" como se había definido en días previos, sino que es un punto de partida que volverá a ser discutido el próximo 30 de junio.
" Es importante jugar con un convenio colectivo firmado . Sustancialmente es el mismo que el de hace un año, pero con un cambio en la fecha de caducidad que nos obliga a ponernos de acuerdo", aseguró el presidente de AIC.
Baretta, por su parte, se mostró contento con el resultado de la negociación y reconoció ante los medios que "los clubes tuvieron mucho de lo que querían".
"Es muy innovador", agregó el presidente de la Liga italiana.
El acuerdo, que llega después de varias semanas de negociación, incluye los seis puntos del convenio en los que ya existía consenso y, además, abre la puerta a la discusión del controvertido artículo 7, por el que la Liga permitía a los clubes decidir unilateralmente que un jugador entrenara por separado del resto de la plantilla.
Esta medida se topó con la oposición de la AIC, que consideraba que podría llevar a "discriminaciones".
El segundo punto sobre el que la Liga Serie A y la AIC no lograban alcanzar un acuerdo era el llamado "impuesto de solidaridad", pero en los últimos días dejó de ser un motivo de discusión pues el gobierno decidió no introducirlo.
El impuesto pretendía gravar con el 5% adicional las rentas superiores a 90,000 euros (125,000 dólares) y con el 10% las que excedan los 150,000 euros (210,000 dólares), por lo que la Liga Serie A y los jugadores no encontraban un acuerdo sobre quién debía asumir el pago.