La golfista mexicana Sophia Sheridan busca su pase a la LPGA

Desde que Lorena Ochoa se retiró del golf competitivo, en mayo de 2010, México se quedó sin una exponente en la Asociación de Golf Profesional Femenil (LPGA, por sus siglas en inglés), pero Sophia Sheridan quiere cambiar el escenario.

“(Conseguir la tarjeta de la LPGA) es la meta de aquí hasta que Dios diga, cada año voy mejor, mi score ha bajado, mi confianza sube con el tiempo y con mi manera de jugar. La meta es estar ahí, ser de las mejores y sé que es muy factible”, dijo en exclusiva a CNNMéxico.

Desde 2006, Sophia es miembro de la LPGA Futures Tour, circuito de ascenso a la LPGA, donde también juegan otras cuatro mexicanas: Marcela León, Pamela Ontiveros, Lilí Álvarez y Tanya Dergal. Sin embargo, Sheridan es la única que ha accedido a la LPGA en 2007 y 2009, como jugadora no exenta.

Además, en la temporada 2011 de la Futures fue la mejor connacional, tras finalizar en la undécima posición de la lista de dinero ganado, con 28,724 dólares, lo cual le significó quedarse a 1,131 dólares de conseguir una tarjeta condicionada de la LPGA.

Al respecto, la tapatía reconoció que “no le puedo echar la culpa a este torneo, esta semana no fue como yo hubiese querido, pero es el esfuerzo de toda la temporada”, en la que disputó 16 torneos y consiguió 5 top 10. 

A pesar del tropiezo, su ánimo sigue intacto, pues de cualquier manera se hubiera enrolado en la escuela de calificación de la LPGA (Q-School), buscando una tarjeta exenta, ya que el estatus condicionado “no te posiciona en buen lugar y apenas puedes entrar a uno o dos torneos, definitivamente no es de las mejores”.

La joven de 27 años conoce muy bien la etapa clasificatoria, pues ha participado tres veces en ella, consiguiendo su mejor resultado en 2006, cuando finalizó en el sitio 35.

“Sé de qué se trata, es el mismo campo de siempre, mi juego contra viento ha mejorado muchísimo y eso es importante para Q-School; tengo muchas ganas y confianza de hacerlo bien”.

Será en diciembre próximo cuando Sheridan intenté alcanzar el sueño, pero antes “voy a estar (en Guadalajara) con Rafa (Alarcón) para mi preparación el próximo mes, después me caso, me voy de vacaciones y regreso a practicar”.

El futuro pinta mejor que nunca para Sophia, pues “aunque nos vamos a casar voy a seguir jugando, es mi sueño y él (José Arreola) entiende perfectamente bien”. El apoyo es fundamental por eso la vida de un golfista tiene que ser “un trabajo en equipo que incluya patrocinadores, entrenadores y familia”, reconoció.