La Copa Africana de Naciones inicia en medio de temores por la inseguridad
La Copa Africana de Naciones (AFCON, por sus siglas en inglés) inicia este sábado con una explosión de color y ruido que durará tres semanas en el continente que enloquece por el futbol.
El torneo paralizará a la región mientras 16 equipos se enfrentan para coronarse como los reyes del futbol en África, pero también hay un poco de temor en el ambiente.
Esto se debe a que el evento de 2010 en Angola fue empañado por un ataque con ametralladoras al autobús del Equipo de Togo en el que murieron tres personas, por lo que los organizadores —la Confederación Africana de Futbol (CAF) — tuvieron que defender su decisión de hacer el evento allí.
Los países coanfitriones, Guinea Ecuatorial y Gabón, son los más pequeños que han organizado el evento, lo que ha generado preocupación sobre la seguridad, así como la infraestructura de viaje y turismo.
CNN examina la compleja naturaleza del evento al investigar los problemas dentro y fuera del campo.
Los países anfitriones
Guinea Ecuatorial y Gabón son países ricos en petróleo y son las naciones más pequeñas que organizan la Copa Africana de Naciones en la historia; juntos tienen una población de poco más de dos millones.
El hecho de ser elegidos resalta la política de la Confederación Africana de Futbol para usar el torneo como una herramienta para la inversión, en espera de atraer el turismo y negocios mucho tiempo después de que termine el evento futbolístico.
“Es apenas la segunda ocasión que África Central tiene el honor de ser sede de la competencia más prestigiosa del continente. La primera vez fue hace 40 años en mi país, Camerún”, dijo a CNN el portavoz de la CAF, Habuba Suleiman.
“Se convirtió en algo único que nos permite completar nuestras principales zonas de lenguaje, árabe, inglesa, francesa, portuguesa y ahora española y de Guinea Ecuatorial.
“Cada uno de los coanfitriones tal vez no podría organizar (él solo) una competencia de 16 equipos. Tuvimos una primera experiencia en el año 2000 (los países anfitriones fueron Ghana y Nigeria) y no fue completamente satisfactorio. Esta vez los dos países cooperaron muy bien como lo demuestra la decisión de conceder visas comunes para los dos países. Este es un gran avance”.
Pero la presión para ellos es ofrecer una Copa exitosa y segura después de la tragedia previa al torneo de Angola, país que tenía poco tiempo de haber terminado una guerra civil que duró tres décadas.
De acuerdo con el experto en futbol africano, Mark Gleeson, quien ha estado en todos los torneos desde 1992, la decisión de la CAF de llevar el torneo a nuevos territorios ha tenido resultados mixtos.
“Cuando llevas la AFCON a lugares como Burkina Faso, Mali, Angola o Gabón, encuentras que las arcas para la estructura deportiva que normalmente serían difíciles de abrir surgen repentinamente y queda un legado de infraestructura de futbol”, dijo a CNN.
“(La) CAF buscó activamente esa línea durante las dos últimas décadas, algunas veces perjudicando al torneo, en Gabón no hay una habitación de hotel ni por amor ni por dinero", dijo.
“Afortunadamente en África no hay muchos aficionados que viajen así que no es mucho problema, pero la infraestructura es mala; ¿Cómo viajas de un estadio a otro?", cuestionó.
“No tienen la enorme presión de los aficionados que viajan, que sí hay en Europa. ¿Qué preferirías, un estadio que permite a un país participar competitivamente en el futbol contra visitantes descontentos que no pueden encontrar una habitación de hotel en dos semanas?".
La cultura del caos
El ataque mortal al equipo de Togo llevó a cuestionar la organización y seguridad del torneo, pero según Gleeson, la Copa Africana de Naciones no puede ser juzgada con los mismos estándares que la Copa del Mundo o la Eurocopa.
“El torneo tiene un encanto caótico y único, tal vez ese es su atractivo”, dijo. “Mi experiencia es que nunca hay nada listo, es un trabajo de parchado, completamente”, afirmó.
“Pero si el futbol inicia en la hora señalada, las cámaras de televisión están en su lugar y pitan el silbato, no importa si la máquina para las acreditaciones se descompuso cinco horas antes”, dijo.
“Creo que hay demasiado énfasis en todo los otros acontecimientos secundarios (más) de lo que se necesita. Es importante que la competencia se lleve a cabo, tener una buena intensidad que los aficionados del futbol africano disfrutarán”.
Suleiman dijo que los acuerdos de seguridad son responsabilidad de los países anfitriones, no del organismo rector.
“No tenemos un ejército para revisar la seguridad. Somos un grupo de personas pacíficas que están convencidas de que el futbol puede ser un factor de unidad, amistad y fraternidad”, reconoció el experto en futbol africano.
“Todos estábamos alterados por lo que pasó en Angola. Fue una tragedia que nos tocó profundamente. Espero que nunca se repita”, dijo a CNN.
La oportunidad
Hay una gran presión para los coanfitriones, pero el orgullo que sienten al organizar el evento deportivo de futbol africano es palpable.
Gabón gastó un estimado de 500 millones de dólares en estadios e infraestructura, a pesar de ser pequeño en comparación con las sedes de otros torneos importantes como China, que gastó un estimado de 42,000 millones de dólares en los Juegos Olímpicos de 2008.
Hugues Dowe, del comité organizador de Gabón, dijo a CNN que ser anfitrión de la Copa de Naciones es “algo excepcional”.
“Finalmente ser sede de un torneo significa muchas oportunidades para Gabón y su gente”, dijo.
“Cuando eres sede de la Copa Africana de Naciones no puedes esperar los beneficios inmediatamente. Pero construimos grandes infraestructuras, como carreteras, estadios y hoteles, con el fin de ser sede”, dijo.
“Estas grandes inversiones son muy importantes para el desarrollo de nuestro país, particularmente en el sector deportivo y turístico”, precisó.
“La seguridad en Gabón estará mejor organizada que la de cualquier otro país que ha sido anfitrión del torneo antes que nosotros”, afirmó.
Dowe también insistió que haría suficientes habitaciones de hotel para acomodar a los 80,000 visitantes que esperan, así como a muchos periodistas que viajan por la competencia, mientras que cuatro estadios que serán sede de partidos en los dos países están abiertos y listos para iniciar.
“Nunca escuché de problemas sin soluciones”, dijo Suleiman. “En África, los pequeños problemas siempre terminan arreglándose”.
“CAF pertenece a cada una de las 53 asociaciones nacionales. Todas, sin excepción, tienen el derecho para buscar la sede. Con cada nueva edición de la competencia, AFCON se ha convertido en un factor económico de desarrollo en términos de estructura e infraestructura", dijo.
”No tendríamos todos estos bellos estadios en África sin la AFCON. Las carreteras que se construyeron, se construyeron instalaciones médicas, se electrificaron zonas y se aceleró el desarrollo de nuevas tecnologías. Es algo que de lo que la CAF puede estar legítimamente orgullosa”, admitió.
El torneo
La Copa Africana de Naciones es el tercer torneo más grande del mundo, detrás de la Copa del Mundo y de la Eurocopa.
En la competencia que se organiza cada dos años compiten 16 equipos divididos en cuatro grupos. Cada país será sede de partidos en dos ciudades. El partido inaugural del grupo A el sábado será en la antigua capital de Guinea Ecuatorial, Bata, mientras los otros partidos se llevarán a cabo en Malabo, la capital desde 1969.
En Gabón, se construyó en Libreville, la capital, un nuevo estadio con capacidad para 40,000 espectadores con la ayuda del gobierno chino y será la sede de la final En Franceville, el Stade de Franceville se remodeló para alojar a 35,000 espectadores.
Los dos primeros equipos de cada grupo pasarán a la etapa de cuartos de final. El partido final se realizará en Liberville, la capital de Gabón el 12 de febrero.
Los equipos
Las naciones que calificaron son: Grupo A: Guinea Ecuatorial, Libia, Zambia, Senegal. Grupo B: Costa de Marfil, Sudán, Burkina Faso, Angola. Grupo C: Gabón, Níger, Marruecos, Túnez. Grupo D: Ghana, Bostwana, Mali, Guinea.
Hay una lista notable de ausentes. Egipto, ganador de los últimos tres títulos, no logró calificar al igual que los poderosos equipos de Camerún, Sudáfrica y Nigeria.
El crecimiento del futbol africano en los últimos años se traduce en que algunos de los nombres más importantes del futbol estarán en el evento, por Costa de Marfil jugará el delantero del Chelsea, Didier Drogba y el mediocampista del Manchester City, Yaya Toure. Seydou Keita, del Barcelona, campeones europeos y de la liga española, jugará en la selección de Mali.