Las pasiones de Ernie Els fuera del campo de golf
Como uno de los golfistas más exitosos del mundo, Ernie Els lo tiene todo. El ganador de tres torneos major es famoso por sus logros deportivos, pero está retribuyendo mucho al deporte que ama y al país que aprecia.
Su fundación de golf está ahora en su décimo tercer año, pero además Els está contribuyendo a la economía de la región de la Ciudad del Cabo, donde se crió, ha invertido en un negocio de vinos y un restaurante, y ha ganado un premio por un complejo de golf que ayudó a diseñar.
E, inspirado por su hijo, ha recaudado millones de dólares para la investigación sobre el autismo.
Al golfista de 42 años de edad no le faltará apoyo local en el torneo Volvo Golf Champions de esta semana en Fancourt en George.
La Ernie Els y Fancourt Foundation fue establecida para ayudar a niños menos privilegiados a adoptar un deporte que no está al alcance de la mayoría en su país natal, Sudáfrica.
“Tenerlo de regreso en casa significa mucho para nosotros”, dice el miembro de la Fundación Kim Daniels.
Su colega Sylvia Masango dice que la experiencia y las lecciones aprendidas de Els y de otros entrenadores y mentores han transformado su vida.
“El golf es lo que soy ahora. Me ha ayudado a convertirme en la persona que soy”, dijo a CNN. “No sé dónde estaría ahora sin el golf”.
Antecedentes familiares
Las propias ambiciones deportivas de Els contaron con el apoyo constante de su padre Neels, que era dueño de una empresa de transportes, y de su madre Hettie.
Conocido como 'Big Easy' por su estilo lánguido, ganó el Abierto de Estados Unidos con sólo 24 años de edad en 1994 y ha estado en la élite del juego desde entonces.
“Yo tenía palos de golf, zapatos de golf; todas estas cosas cuestan mucho dinero. El equipo de golf es muy caro. Hay muchos niños en Sudáfrica y en todo el mundo que tienen talento. He visto a niños que no lo logran debido a su incapacidad de pagar por un buen equipo”, dijo a CNN.
“Así que se quedan en el camino, lo he visto ocurrir. Es por eso que iniciamos la fundación, para hacer que realmente perfeccionaran sus habilidades”.
El graduado estrella de la fundación es el campeón del Abierto Británico de 2010, Louis Oosthuizen , quien pasó tres años en el programa y ahora hace visitas regulares para inspirar a los alumnos.
“Los dioses nos sonrieron al hacer que un chico como Louis llegara a la fundación”, dijo un orgulloso Els.
“Siento que era algo que quería hacer porque tengo tanto cariño por Sudáfrica, tanto cariño por el país y por su gente. Sentí que era mi deber devolver algo a los menos afortunados”.
Oosthuizen está agradecido por su tiempo en la fundación y las importantes lecciones aprendidas antes de irrumpir en la escena del golf.
“Es muy especial haber pasado tres años en la fundación, y es genial lo que Ernie está haciendo por los niños”, dijo a CNN.
Fundación para el autismo
Si la fundación es querida para Els. La organización de recaudación de fondos que ha iniciado para combatir el autismo es una verdadera labor de amor.
Su hijo Ben fue diagnosticado con esta condición cuando tenía cuatro años, y Els se impuso la meta de establecer un centro de excelencia para el autismo que estuviera a la vanguardia en investigación y terapia educativa, “algo que el mundo nunca hubiera visto antes”.
Desde que anunció públicamente la enfermedad su hijo en 2008, Els ha hecho campaña en favor de Autism Speaks y utilizó sus conexiones deportivas para recaudar millones de dólares para su Els for Autism Foundation.
Su sueño se está volviendo realidad. “El próximo año esperamos recaudar 5 millones de dólares y estar casi listos para ser pioneros con el nuevo centro”, dijo a CNN.
Els mudó a su familia —su esposa Liezl, su hija Samantha y Ben— desde su casa principal en el campo de golf de Wentworth en el sur de Inglaterra a Florida para obtener un mejor tratamiento para su hijo, que está “bastante afectado” por la condición.
Con su fama mundial y su influencia, Els sabe que está en condiciones de hacer una diferencia real en la lucha contra el autismo.
“Tenemos los recursos, tenemos el dinero para realmente hacerle frente. Hay personas y familias que no tienen eso, por eso queremos tratar de mejorar sus vidas”.
Intereses comerciales
Els pasa la mayor parte de su tiempo residiendo en Palm Beach, pero cada invierno vuelve a Sudáfrica para comprobar personalmente sus intereses privados y comerciales.
Estos incluyen un floreciente negocio de diseño de campo de golf y la realización de su sueño de construir un diseño en un área del Cabo, donde solía pasar el rato con amigos y disfrutaba de parrilladas en la playa.
El campo Oubaai en la Bahía de Herold ya está establecido, con 18 hoyos asentados en un entorno escarpado cerca del Océano Índico.
Fue votado como el 'Mejor Resort de Golf en Sudáfrica' en una encuesta realizada en 2007.
Els también ha diseñado campos en cuatro continentes, pero su imperio empresarial no termina ahí.
Después de haber conocido a su esposa en una granja en Stellenbosch, la cual es famosa por sus viñedos, desarrolló un amor por la uva y, con el inicio de siglo, creó Ernie Els Wines.
Se asoció con el experto Louis Strydom para desarrollar una gama de cinco vinos tintos, y en 2011 agregó un blanco a la colección.
Los visitantes de la zona no tienen que ir muy lejos para degustar los productos, que están a la venta en el restaurante Big Easy, en la segunda vía más antigua de Sudáfrica en Stellenbosch.
Ambiciones en el golf
Con todos estos compromisos, se podría esperar que Els se deslizara lentamente hacia abajo en la clasificación mundial al acercarse la etapa final de su carrera.
Pero el exnúmero uno sigue desesperado por sumar títulos a su lista de cerca de 70 victorias en todo el mundo y a su cuenta de majors.
No pudo ganar en el Tour PGA de Estados Unidos en 2011, lo que significa que se perdió el Tournament of Champions de apertura de temporada en Hawai, pero después de jugar en Sudáfrica esta semana volverá a pasar la mayor parte de su temporada en Estados Unidos.
“Quiero concentrarme en Estados Unidos y obtener algunas victorias temprano en el año y, con suerte, algo de confianza antes del primer major en Augusta ”, dijo Els, quien ahora se ubica en el puesto 71.
¿Y cuánto tiempo seguirá jugando en el nivel más alto?
“Bueno. No quiero que termine ahora”, sonrió. “Tengo 42 años y estoy en una forma bastante decente para un jugador de golf. Quiero seguir ganando torneos, el deseo sigue ardiendo con fuerza”.