Woods, conforme con su progreso pese a decepción en la final de Abu Dabi
El tercer puesto compartido que logró el golfista estadounidense Tiger Woods en el Campeonato de Abu Dabi demostró que el ex número uno del mundo está acercándose cada vez más a su mejor nivel.
Durante las primeras tres rondas bajo el calor desértico de Oriente Medio, el estadounidense de 36 años tuvo una precisión milimétrica con sus hierros y en la salida del tee.
El putt de Woods estuvo frío el primer día pero luego encontró su forma en los greens y en la jornada final del domingo pudo acertar tiros desde entre dos y tres metros, que habían sido su némesis en los últimos dos años.
El 14 veces campeón de torneos major finalizó el certamen a dos golpes del sorpresivo ganador Robert Rock, pero optó por remarcar las cosas positivas de su semana.
"Estoy conforme con el progreso", declaró Woods a periodistas tras su tarjeta de cierre de 72 golpes, que se sumó para un total de 277, 11 bajo el par.
"Básicamente, desde que jugué en Australia (a fines del 2011) mis eventos por golpes han sido bastante buenos. Sólo tengo que seguir mejorando, lograr mayor consistencia", agregó.
Cuando el domingo se encontró en un duelo mano a mano con Rock, Woods careció de esa ansiada regularidad entre el tee y el green.
Estaba previsto que el ex número uno impusiera su autoridad sobre su inexperimentado colega, pero en lugar de ello fue el inglés quien tomó la iniciativa mientras Woods alcanzaba el green empatando el par en los primeros hoyos de la ronda final.
El estadounidense, que subió del puesto 25 al 17 en el ranking PGA tras su actuación en Abu Dabi, no tuvo el brillo de otra época y le costó conseguir birdies.
"Creo que el punto de inflexión para mí fue el décimo (hoyo), donde lancé mi golpe más hermoso después de que había tenido un birdie en el noveno para reducir la diferencia a uno (con el líder Rock)", señaló Woods.
"Pero no sé cómo hizo lo que hizo (la pelota) porque desde mi posición se veía bastante bien. Lo siguiente es que hice un bogey", añadió.
Woods mostró conformidad con su rendimiento a pesar del resultado final.
"Le pegué hermosamente a la bola durante toda la semana y estoy muy conforme con eso, pero no tuve ese toque el domingo", simplificó el estadounidense.
De todos modos, su actuación contra jugadores de primer nivel en Abu Dabi representa una continuidad para una resucitación que comenzó al ganar el Chevron World Challenge el mes pasado en California.
Su última victoria en un evento completo fue en el Masters de Australia 2009, antes de que su juego decayera por lesiones y la crisis de su matrimonio .
Su próxima cita será el torneo Pebble Beach National Pro-Am, a la espera del primer major de la temporada: el Masters de Augusta en abril.
"Le pegué a la bola suficientemente bien como para ganar el torneo esta semana", destacó Woods.
"Ahora tengo una semana para prepararme para Pebble y despúes tengo un par de semanas de eventos del Campeonato Mundial de Golf (WGC, por su sigla en inglés)", agregó.