¿Por qué la carrera de la F1 de Bahrein se encuentra bajo fuego?
Los partidarios de la democracia en Bahrein y los políticos del mundo buscan la cancelación de la carrera de la Fórmula 1 que se llevará a cabo el domingo en el país del Golfo, debido a que continúan los disturbios entre activistas y autoridades.
¿Cuáles son los problemas que rodean esta controversia y cómo reaccionan los fanáticos de este deporte?
¿Por qué hay llamados a cancelar el Gran Premio de Bahrein?
Grupos de oposición en Bahrein, así como políticos, grupos derechistas y fanáticos de la F1 en todo el mundo desean que se cancele el Gran Premio del domingo –el cual podrá ser visto por más 500 millones de espectadores a nivel global-, dado que este país del Golfo está plagado de muestras de violencia luego de meses de disturbios políticos.
Los manifestantes ven la carrera como un truco publicitario de los gobernantes del país para que la nación parezca unificada cuando no lo está. El Gran Premio de Bahrein se canceló el año pasado en medio de una revuelta chiita en contra de la monarquía suní y una ofensiva del gobierno en la que murieron docenas de personas y cientos fueron detenidas.
Nadeel Rajab, un manifestante opositor dijo que no estaban en contra de la Fórmula 1 en sí. “Estamos en contra del gobierno o de la élite represora que utiliza el evento como relaciones públicas”, dijo Rajab.
En Inglaterra, donde se encuentra la base de la mayoría de los equipos de la F1, el líder de la oposición Ed Miliband dijo: “En general la política y los deportes no deberían mezclarse, pero… ¿Qué clase de señal se envía al mundo cuando este gran premio sigue adelante a pesar de los problemas que existen, dada la violencia que se ha visto en Bahrein, y dados los continuos problemas en cuanto a derechos humanos?”.
“No creo que sea una decisión adecuada dejar que continúe el gran premio y creo que el gobierno necesita sopesar la situación y expresar su opinión”.
Yvette Cooper, una política de la oposición, hizo un llamado a las estrellas de la F1 Jenson Button y Lewis Hamilton para que se retiren de la carrera. “No debe seguir adelante, creo que los conductores ingleses no deberían asistir. Creo que la Fórmula1 no debería llevarse a cabo en Bahrein”, dijo Cooper a la BBC.
Pero el primer ministro del Reino Unido, David Cameron, se rehusó a atender los llamados insistiendo en que correspondía a las autoridades de la F1 tomar la decisión de que continuara la carrera o no. “Es importante que se sigan permitiendo las manifestaciones pacíficas”, dijo.
¿Por qué hay protestas en este momento en Bahrein?
Grupos chiitas de la oposición en el reino de gobierno suní dicen buscar equidad y han hecho llamados en las redes sociales para realizar propuestas diariamente durante el fin de semana en que se llevará a cabo el Gran Premio, con el fin de centrar la atención en sus exigencias.
El gobierno ha buscado prohibir las protestas en la capital Manama, pero ha fallado en intentar evitar enfrentamientos violentos en la capital, entre manifestantes opositores y autoridades, quienes han sido acusadas de tácticas violentas.
El gobierno ha condenado la violencia de ambas partes, diciendo que cualquier oficial a quien se le compruebe abuso de autoridad será investigado y que los manifestantes también deberán comportarse de manera civilizada.
Un reporte de Amnistía Internacional señaló esta semana que las promesas de reforma en Bahrein son inadecuadas y no proveen de justicia a las víctimas de violaciones a sus derechos humanos.
Los manifestantes también exigen que se libere al activista Abdulhadi al-Khawaja, quien ha estado en huelga de hambre durante más de 70 días. Abdulhadi al-Khawaja, de 52 años, fue arrestado en abril de 2011 por su participación en las protestas antigubernamentales que comenzaron un mes antes, con las exigencias de reformas políticas y mayores libertades en la nación suní de mayoría chiita.
En junio, Bahrein lo encontró, junto con otros activistas de la oposición chiita, culpable de conspiración para derrocar a la familia real suní del país.
El gobierno también es acusado de castigar a los héroes nacionales y acusarlos de traición. Grupos de derechos humanos nacionales e internacionales dicen que tres jugadores de futbol sóccer de la nación bahrení fueron arrestados el año pasado junto con otros 150 deportistas, mujeres y administradores. No está claro por qué siguen en prisión.
Las autoridades sostienen que formaban parte de protestas violentas e ilegales.
¿Podrían los manifestantes interrumpir la carrera y amenazar a los espectadores?
Esta es la gran pregunta. Los manifestantes han prometido protestar cerca del circuito Sakhir, que tiene unos 40 kilómetros de largo, desde Manama, pero testigos señalan que hay gran presencia policial en el camino entre la pista y el aeropuerto.
El descontento afecta la realización de la carrera, debido a que los competidores tendrán que pasar por zonas donde ha habido enfrentamientos para poder llegar al circuito, que se encuentra en el desierto.
El jueves, los manifestantes quemaron llantas, bloqueando brevemente muchos de los caminos que llevan a Sakhir. Un coctel molotov explotó el miércoles pasado cerca de un auto que transportaba a miembros del equipo de la F1, de la fuerza de la India, durante enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad. No se reportaron heridos en el incidente.
Dicho incidente ocasionó que un miembro del equipo y un contratista regresaran a casa a pesar de las aseveraciones de los oficiales de que Barhein es un lugar seguro. Bahrein se ha negado a extender visas a grupos periodísticos no deportivos de CNN y ortras organizaciones de medios, alegando que no podrán quedarse para la carrera.
¿Qué dicen los conductores de la F1 y el cuerpo rector del organismo?
El cuerpo rector de la Fórmula 1, FIA, decidió la semana pasada que la carrera se llevaría a cabo, luego de semanas de especulación. El cuerpo rector afirma que su presidente viajó a Bahrein en noviembre para reunirse con un “amplio grupo de formadores de opinión y de individuos que toman las decisiones, entre los que se encontraban miembros electos del parlamento de chiíta. Todos expresaron su deseo de que se lleve a cabo la carrera del Grand Prix en 2012”, dijo.
Los conductores han intentado distanciarse de la violencia. Romain Grosejan cuyo equipo Lotus tiene su base en Francia, se preparaba para el evento “lo mejor que podía”.
“Como dicen ustedes, no podemos ignorar la situación. Pero, por otro lado, espero que la carrera aclare la visión y ayude a la situación, y creo que el Gran Premio saldrá bien”, dijo a los reporteros en Bahrein.
El campeón Sebastian Vettel se sacudió las preocupaciones respecto a la seguridad diciendo: “Supe del problema con Force India”.
“Por lo general, en el paddock (área donde se exhiben los autos) parece que no hay problema”, dijo a la Asociación de Prensa. “Fuera del paddock puede haber riesgos pero creo que donde quiera que vamos hay riesgos”.
El siete veces campeón del título, Michael Schumacher, insistió en un inicio que no quería involucrarse: “Sólo diré una cosa: no quiero mezclar el deporte con la política. Estoy aquí por el deporte”.
¿Cuánto vale la carrera para Bahrein y para la F1?
Bahrein pagará 64 millones de dólares por ser anfitrión del Gran Premio pero se calcula que el reino de la isla reciba varias veces esa cantidad –hasta 800 millones de dólares- derivados del turismo y otros beneficios económicos.
El asunto más relevante es el prestigio que otorga la carrera. “Bahrein no es muy distinto de otros países del Golfo que emplean eventos deportivos de alto perfil como los torneos de tenis y golf para aumentar su prestigio internacional”, dijo a CNN James Montague, periodista que ha escrito acerca del deporte en el Medio Oriente y que es autor de When Friday Comes: Football in the War Zone (Cuando llega el domingo: Futbol en la zona de guerra).
“Un claro ejemplo es Qatar, que ganó la oferta para ser anfitrión en las finales de la Copa del Mundo de 2022. El Gran Premio de la F1 ha sido un instrumento para que el perfil internacional de Bahrein se eleve más allá de ser una pequeña isla con una población de alrededor de 1 millón de personas”.
“La idea de separar los deportes y la política es peor que un mito. Es falsa. La familia real de Bahrein aseguró la carrera de la F1 con más que objetivos económicos y políticos en mente. Incluso están promoviendo la carrera dentro de Bahrein como una fuerza potencialmente unificadora para el reino. Afirman que la política no participa en los deportes pero separar las realidades del deporte de las de la política de cualquier sociedad es tan imposible como separar la política del arte o la música”.
¿Ha habido protestas en contra de las carreras de la F1 en otros países acusados de abuso a los derechos humanos?
No. La carrera de la semana pasada en China se llevó a cabo sin llamados a que se cancelara, a pesar de los problemas en cuanto a derechos humanos en el país. Lo mismo puede decirse de las carreras en Rusia y Singapur.
Las únicas protestas importantes en la historia de la Fórmula Uno –un deporte e industria multimillonaria- se dieron en el Gran Premio de Sudáfrica, en Kayalami, en 1985, en contra del régimen del Apartheid. A pesar del boicot de los equipos sudafricanos en otros deportes, en aquella época, el evento se llevó a cabo, pero se canceló al año siguiente y se retomaron actividades hasta 1992.
¿Cómo han reaccionado los fanáticos de la F1?
Muchos fanáticos del deporte han mostrado disgusto en infinidad de declaraciones en Twitter donde dicen que ni siquiera verán la carrera por televisión en señal de protesta. Ed Foster, escritor de la revista de autos Motorsport ¸ dijo a CNN: “Hicimos una encuesta en nuestro sitio web recientemente y la respuesta fue instantánea. Simplemente escribimos ‘¿Se debe llevar la F1 a Bahrein, sí o no?’ y cientos de personas respondieron de inmediato”.
“Creo que sólo uno se pronunció a favor. Al hablar con la gente queda bastante claro que muchos han decidido que no verán la carrera por principios”.
No queda claro cómo reaccionarán los fanáticos de la Fórmula Uno ante los llamados a boicotear la carrera –ya sea en la pista o por televisión-. Pero una agencia de noticias, la Asociación de Prensa del Reino Unido, reportó que había pocos espectadores en la tribuna principal de Sakhir para ver la sesión de práctica del viernes.