Los médicos examinarán el cerebro del exjugador de la NFL Junior Seau

Los familiares de Junior Seau permitirán que los médicos hagan estudios del cerebro del exjugador de la NFL y linebacker para buscar evidencias de traumatismos, declaró el viernes el capellán de los Cargadores de San Diego, Shawn Mitchell.

Desde que se dio a conocer la noticia que el linebacker se había suicidado el miércoles disparándose en el pecho, han surgido especulaciones sobre si los repetidos golpes sufridos a lo largo de 20 años de carrera como profesional del futbol pudieran ser un factor determinante en su proceder.

La familia tomó la decisión de permitir la investigación con la esperanza de ayudar a los jugadores de la NFL y a otras personas en el futuro, dijo Mithell.

La oficina de investigación médica del condado de San Diego clasificó el jueves la muerte de Seau como un suicidio, pero declaró que el reporte final de la autopsia puede tomar hasta 90 días para estar listo.

Aunque no hay evidencia de que Seau sufriera de encefalopatía traumática crónica (CTE por sus siglas en inglés), una enfermedad degenerativa causada por múltiples contusiones, sus familiares y amigos han declarado que el legendario linebacker sufrió un sinnúmero de golpes en la cabeza a lo largo de su carrera.

Como linebacker, jugaba “la posición más caótica dentro del equipo. Sufrió múltiples contusiones, así que hay una fuerte sospecha de que algo tuvo que ver”, dijo el jueves Mitchell, pastor y amigo de la familia de Seau.

Mitchell, quien estuvo al lado de la desconsolada madre de Seau mientras enfrentaba los mares de fotógrafos mientras describía la muerte de su hijo, dijo que la familia ha recibido llamadas de diferentes médicos pidiendo estudiar su cerebro.

Mientras que Mitchell no supo determinar quiénes fueron los médicos que solicitaron hacer los estudios, dijo que entre las instituciones a las que la familia donará parte del cerebro están el Centro de Estudios de Encefalopatías Traumáticas de la Universidad de Boston, el centro que determinó que el exjugador de los Chicago Bears Dave Duerson sufría de un daño degenerativo en el cerebro debido a los repetidos golpes.

Duerson se suicidó disparándose al pecho en el 2011, dejando una nota suicida en la que pedía que se estudiara su cerebro en busca de un posible daño.

La muerte de Seau sigue a la muerte del exjugador de los Atlanta Falcons Ray Easterling, el demandante principal en una demanda legal contra la NFL por daños causados debido a las contusiones. La demanda enlista a más de mil jugadores profesionales.

En los casos de Duerson y Easterling, ambos presentaban síntomas por repetidos traumatismos en la cabeza: pérdida de memoria, ira y depresión profunda, esto según lo expresado por familiares y amigos. Y en ambos casos, los estudios mostraron daños en el cerebro debido a traumatismos.

Más de 100 exjugadores de futbol profesional añadieron el jueves su nombre a los de la creciente lista de personas demandando a la NFL, alegando que “repetidamente refutaron la conexión entre las contusiones y el daño cerebral”, según la demanda puesta en la Corte de Distrito de los Estados Unidos con base en Atlanta por el abogado Mike McGlamry.

La NFL ha refutado en repetidas ocasiones estos argumentos, diciendo que la seguridad de los jugadores es una prioridad. “Cualquier alegato que diga que la NFL intencionalmente le mintió a los jugadores no tiene validez”, dijo.

Al parecer Seau no formaba parte de ninguna de las demandas interpuestas contra la NFL.

El corresponsal médico de CNN, el doctor Sanjay Gupta advirtió sobre sacar conclusiones en el caso de Seau, aunque dijo que hay muchas similitudes entre su muerte y otros casos que involucran a jugadores de futbol profesional.

La única manera de determinar si Seau sufría de CTE es analizando el tejido cerebral en busca de “marcas distintivas de una enfermedad parecida a la demencia”, dijo Gupta.

Aunque Seau no tenía un historial conocido de contusiones dijo Gupta “los golpes no siempre resultan en una contusión diagnosticada, sin embargo el cerebro es sujeto a golpes una y otra vez”. 

Joe Gallagher, amigo de la familia de Seau, dijo que el exlinebacker hizo un comentario recientemente que parecía ser indicio de un posible problema.

“Junior quería donar su cerebro a la ciencia para que lo estudiaran y buscaran heridas relacionadas a contusiones”, dijo a la KGTV de San Diego, filial de CNN.

Tim Abell, actor y abogado veterano quien condujo lo que al parecer fue la última entrevista a Seau el lunes durante un torneo benéfico de golf, dijo que no notó actitudes suicidas en Seau.

“Se veía jovial y contento” dijo el viernes en el programa de CNN Starting Point.

Seau fue reclutado a la NFL en la primera ronda de 1990 de la Universidad del Sur de California. Debutó con los San Diego Chargers demostrando su potencial para el Salón de la Fama como elemento Pro Bowl.

Dejó San Diego antes de la temporada 2003 para unirse a los Miami Dolphins y pasó parte de las últimas cuatro temporadas con los New England Patriots antes de retirarse en el 2011. Seau amasó 1,526 tacleadas, 56.5 saques y 18 intercepciones a lo largo de 20 años de carrera.

La muerte de Seau conmovió a la ciudad de San Diego, al sur de California, dónde perteneció al grupo de 1994 Chargers, el único equipo en la historia de la franquicia en llegar al Super Tazón.

A lo largo de su carrera evitó la publicidad negativa que infestaba a muchos dentro de la NFL.

Pero en octubre del 2010 llegó a los encabezados de las noticias cuando se le acusó por violencia doméstica después de tener un incidente con su novia, y horas después del arresto se desbarrancó con el auto para chocar en la playa. Los investigadores determinaron que el choque había sido un accidente, ya que se había quedado dormido al volante.

El miércoles Seau fue parte de los encabezados nuevamente. Su novia, que acababa de regresar a casa después de un entrenamiento, lo encontró en el baño de su casa con la pistola tirada junto a él, reportaron las autoridades.

No quedó claro si Seau dejó alguna nota o alguna explicación.

Horas antes de su muerte, Mitchell declaró que le había escrito a su exesposa y a sus tres hijos.

“Simplemente decían ‘Los quiero’”, Mitchell dijo a CNN. ”Ellos respondieron al mensaje con un ‘También te quiero, papá’”.