Silverstone: de una pista precaria a un 'paddock' de alta tecnología
Construido sobre una antigua pista de aterrizaje de la Segunda Guerra Mundial, Silverstone ha recorrido un largo camino desde que el piloto Stirling Moss corrió por primera vez alrededor de bombonas de aceite y pacas de heno hace más de 60 años.
El icónico circuito inglés se ha vuelto algo más que un lugar deportivo. Representa el rico pasado del automovilismo británico y es la clave para su futuro en la Fórmula Uno, aunque Moss anhela las curvas y las líneas rectas que ahora han sido renovadas.
“Me gustaba como un campo de aviación, debo ser honesto”, dijo Moss a CNN, quien hizo su debut en Silverstone en 1948.
Gran Bretaña ha tenido una carrera en el calendario de la Fórmula Uno desde que el campeonato comenzó en 1950.
El Gran Premio británico se disputó entre los cirtuitos de Silverstone, Brands Hatch y Aintree hasta 1987. Desde entonces siempre tiene lugar en Silverstone.
Sin embargo, en la última década, hubo un peligro real para la realización del evento en Silverstone debido a las disputas públicas sobre el dinero y las acusaciones de una falta de desarrollo por parte del director de la F1, Bernie Ecclestone .
En 2008, Ecclestone anunció que el cirtuito rival de Donington, situado también en Inglaterra, se haría cargo de la carrera tras un acuerdo por una década, pero el trato colapsó un año después debido a la falta de fondos.
Mientras, Silverstone dio un paso para asegurar un contrato de 17 años, desde 2010. El propietario del circuito, el Club de Pilotos Británicos, anunció un nuevo diseño que daría la bienvenida a la división élite del motociclismo: MotoGP.
El año pasado, el nuevo Silverstone Wing fue revelado: un complejo de pits y paddock de 44 millones de dólares.
“Creo que ahora es uno de los más sofisticados, pero lo que era esencial era obtener el acuerdo de Bernie Ecclestone de que podíamos tener una licencia larga para que podamos asegurarnos de mantener al Grand Premio británico en donde realmente pertenece, en el corazón de Silverstone”, dijo Moss, quien compitió en la F1 desde 1951-61.
Moss nunca logró ganar en Silverstone. Las únicas dos victorias que consiguió en tuvieron lugar en el cirtuito de Aintree.
“Una de las razones por las que entré a las carreras automovilísticas fue porque era peligroso”, dijo el expiloto de 82 años, cuya carrera competitiva terminó después de un accidente antes del inicio de la temporada de F1 de 1962.
“Silverstone fue uno de los circuitos realmente rápidos. No tenías pasadores para el cabello ni todas esas cosas para perder el tiempo. Para ganar el Gran Premio británico, y por tantos años, el Gran Premio Europeo, se necesita un montón de kudos (puntos)”.
La victoria de 1957 de Moss, compartida con Tony Brooks, fue la segunda ocasión en que la carrera británica tenía el título honorario “europeo”. La victoria de James Hunt de 1977 fue la última que se disputó en territorio inglés bajo esta denominación. Actualmente, el Gran Premio de Europa se organiza en Valencia, España.
Los automóviles ahora son máquinas hábiles y seguras que siguen llegando a 321.8 kph a pesar de las restricciones de velocidad.
La seguridad del piloto ahora es fundamental, después de años de muertes de pilotos antes de que fueran hechas mejoras en la década de 1970.
Pero en 1948 el automovilismo en Silverstone era más aterrador.
“Estabas sentándote muy, muy abajo, y ver a dónde iba el circuito no era tan fácil en ese momento”, explicó Moss.
“Tenías que figurar dónde estaba el circuito o en qué parte del circuito debías estar, por lo tanto había barriles de aceite y pacas de heno; que, por supuesto, ¡las personas ocasionalmente golpeaban y esquivaban!”.
En la década de 1950 y 1960, las pilas de tierra eran levantadas para dar a los espectadores una vista mejor y más segura a medida que las pacas de paja y barriles eran empacados.
“En 1990 hicieron una cantidad tremenda de revisión al circuito, para hacerlo más sofisticado, un circuito más técnico”, dijo Moss.
“No estoy seguro de que me hubiera gustado, pero lo habría dejado en ese entonces”.
En 1991, el piloto británico Nigel Mansell ganó la carrera, desde la posición de pole, la tercera de cuatro ocasiones.
Célebremente dio a su rival Ayrton Senna una carrera de vuelta a los pits después de que el brasileño se quedará sin combustible en la última vuelta.
Ese año Mansell fue segundo en el campeonato por tercera ocasión, pero tuvo uno mejor en 1992 cuando volvió a triunfar en Silverstone.
“El éxito de Nigel Mansell fue un paso adelante”, dijo Moss. “Nigel también es un exhibicionista; ¿no se salió de la vuelta y besó el piso? o algo pasó que añade un poco de brillo al lugar”.
Las esperanzas británicas de este fin de semana recaen con los excampeones mundiales de McLaren Lewis Hamilton y Jenson Button, mientras que Paul Di Resta es un forastero con Force India.
“El Gran Premio británico es especial porque obtengo un impulso masivo de todos los fanáticos”, dijo Hamilton a los reporteros.
“Para mí, ganar en Silverstone está al mismo nivel que ganar en Mónaco. Pararse en el escalón más alto del podio en 2008 estuvo entre los momentos más dulces de mi carrera”.
El mejor final para Button en su casa es en cuarto lugar, pero el inglés está batallando para volver a ganar la forma en la que ganó el título mundial en 2009.
“Siempre disfruto correr en casa porque la atmósfera es insuperable, y aunque la carrera en sí no siempre ha sido amable conmigo, vengo cada año sabiendo que puedo contar con el apoyo de los miles de fanáticos”, dijo.