Fernando Alonso: el incomprendido pero exitoso piloto de Fórmula 1
Amado y odiado, Fernando Alonso es el piloto español más exitoso detrás del volante de un Fórmula 1.
Nacido en Oviedo, España hace 31 años, Fernando Alonso se ha hecho de un nombre en el deporte gracias a su efectividad sobre la pista, donde sus números hablan por sí solos: dos veces campeón mundial, en 2005 y 2006, y ha conseguido 30 triunfos , que lo ubican como el cuarto piloto de la historia por número de victorias, tan solo detrás de campeónes como el británico Nigel Mansell o el brasileño Ayrton Senna.
Sin embargo, su personalidad divide a los aficionados y a la prensa.
Lejos de ser un tipo fácil, Alonso se ha caracterizado por su semblante serio y caracter voluntarioso, lo que lo llevó a perder la simpatía de algunas personas.
Hijo de un mecánico industrial y de una dependiente, los medios económicos eran limitados, no así la pasión de su padre, José Luis Alonso, por el automovilismo.
Un pequeño 'kart' hecho para su hermana cayó en las manos del piloto a los cuatro años. A los siete ya contaba con una licencia de la Real Federación Española de Automovilismo y se llevó el campeonato infantil de Asturias y Galicia.
La economía familiar no alcanzaba para cubrir los gastos y así fue como la empresa importadora de 'karts' para España lo apoyó y cosechó numerosos triunfos.
Uno de los personajes de gran influencia en la carrera de Alonso fue el italiano Flavio Briatore, director del equipo Renault F1, quien lo llevó a la máxima categoría contratado por esa misma escudería.
Siete victorias en 2005 le permitieron convertirse en campeón mundial e interrumpir la racha de cinco seguidos de Michael Schumacher. Esto le valió, al final del año, anunciar que conduciría para McLaren en 2007.
En 2006, Fernando se convirtió en el primer español en ganar el Gran Premio de su país. Hacia el cierre de la temporada, llegó a Italia en igualdad de puntos con Schumacher.
En la última carrera del año Alonso se proclamó bicampeón mundial, el más joven en conseguirlo. La atención de la prensa se volcó sobre él. Pero el asedio lo hizo retraerse y volverse hosco hacia los medios.
Al llegar al equipo de McLaren, corrió junto a una nueva estrella, el inglés Lewis Hamilton.
Alonso demandó trato preferencial, pero las rígidas políticas del equipo inglés nunca cuadraron con los deseos del español. A esto se sumó que en ese momento se presentara el caso de espionaje en el que un miembro de Ferrari le entregó los planos y especificaciones del monoplaza rojo a un ingeniero de McLaren.
El caso llegó a las cortes británicas. La defensa de McLaren aseguraba que había sido solo entre las personas involucradas y no el equipo. Sin embargo, Alonso amenazó a Ron Dennis, CEO del equipo inglés, con revelar que él tenía conocimiento de los hechos. Las declaraciones del corredor español derivaron en una sanción histórica de 100 millones de euros. Su salida del equipo inglés era inminente.
Alonso regresó a Renault. En 2008 sumó victorias en Japón y Singapur, pero en esta última se vio envuelto en un escándalo, debido a que había repostado combustible justo antes de que su compañero Nelson Piquet Jr. tuviera un accidente. Después de la carrera, Piquet Jr. declaró que había chocado por orden de Flavio Briatore para beneficiar al español.
Briatore fue expulsado de por vida de la Fórmula 1 y Piquet despedido de Renault; Alonso conservó la victoria y a Briatore como manager.
Emilio Botín, cabeza del banco Santander, venía presionando a la Scuderia de Ferrarri para que obtuviera los servicios de su piloto preferido, Alonso.
A principios de 2010 el piloto llegó a Ferrari, ya que el piloto finlandés Kimi Räikkönen, aceptó una terminación prematura de contrato.
La temporada fue extremadamente competitiva y la paridad con el equipo Red Bull y sus pilotos hizo que el final fuera bastante cerrado; ni sus cinco triunfos (Bahrain, Alemania, Italia, Singapur y Corea) le dieron la ventaja necesaria. Al final, Sebastian Vettel se alzó con el campeonato .
El convertirse en piloto de la Scuderia Ferrari parece haberle brindado a Fernando una nueva estabilidad. El asturiano luce más tranquilo y compuesto.
Fernando Alonso domina como nadie la pista, combinando frialdad y velocidad y distinguiendose como uno de los pilares de la Fórmula 1.
Y ahora está en la pelea por conseguir su tercer campeonato mundial. ¿El rival en turno? El alemán Sebastian Vettel.
Este es un fragmento de un artículo publicado en la edición de octubre de 2012 de la revista Life&Style, que es parte de Grupo Expansión, una empresa de Time Inc. La firma edita en México 17 revistas y siete sitios de internet, entre ellos CNNMéxico.com.