En el mundo del deporte, algunos atletas no solo han tenido que pelear por lograr grandes triunfos, sino también por salvar sus vidas.
Este martes
En México, un caso similar sucedió con el futbolista paraguayo Salvador Cabañas, quien sobrevivió a un ataque en un bar de la Ciudad de México en 2010. Tras una discusión, el entonces delantero del club América recibió un disparo en la cabeza que puso fin a su exitosa carrera.
Quien no sobrevivió a un atentado fue el exjugador de la selección de futbol de Colombia Andrés Escobar, agredido por un aficionado quien no perdonó el autogol del futbolista que le costó al equipo cafetalero su eliminación del Mundial de Estados Unidos de 1994.
En el tenis también se vivieron momentos de tensión durante el abierto de Hamburgo de 1993, cuando un hombre se metió a la cancha para apuñalar a la tenista belga Monica Seles. El agresor argumentó que solo quería dejarla herida para que Steffi Graf volviera a ser la número uno del mundo.
Uno de los atentados que más deportistas muertos ha dejado sucedió en los Juegos Olímpicos de Munich de 1972, tras el fallido rescate de 11 atletas israelíes que fueron secuestrados por terroristas palestinos.