La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) declaró ganador de la Copa Sudamericana al club brasileño Sao Paulo, pero le aplicó una multa de 100,000 dólares al igual que al otro finalista del torneo, el argentino Tigre, por incidentes en el estadio.
El partido se jugó en el estadio Morumbí de Sao Paulo el 12 de diciembre. El árbitro lo suspendió luego del primer tiempo ya que al campo bajo el argumento de que fueron agredidos.
Tigre acusó a la policía y a los responsables de seguridad de Sao Paulo de apuntar con armas a sus jugadores en el vestuario durante el descanso del partido.
La primera mitad había terminado en una trifulca en la que participaron futbolistas, responsables de ambos equipos y aficionados.
Sao Paulo iba ganando 2-0 y el club dijo en su defensa que Tigre se negó a seguir jugando porque temía una goleada.
La Conmebol declaró ganador al conjunto brasileño, multó a ambos clubes y suspendió al Morumbí por un encuentro oficial de los torneos que organiza, dijo el organismo.
Sao Paulo es una de las ciudades que albergará el Mundial 2014.
Los clubes tienen un plazo de ocho días para apelar la sanción, según la Conmebol.