El futbolista inglés David Beckham llegó a Beijing este miércoles para participar en una gira promocional de cuatro días en la que fungirá como embajador internacional de la Superliga China de futbol, que pretende pasar página a escándalos de corrupción.
Beckham será la imagen en el exterior de la liga asiática, que celebra de esta manera su vigésimo aniversario. Como parte de sus obligaciones, el británico asistirá a partidos de la liga china y visitará las sedes de tres clubes en las ciudades de Beijing, Qingdao y Wuhan.
El futbolista debe promocionar en otros países una liga todavía desconocida y en la que la calidad parece haber ido en declive en los últimos años. Tras clasificarse para Corea/Japón 2002, la Selección China ha estado ausente de los mundiales.
La liga china ha llevado a cabo en los últimos tres años una implacable campaña contra las mafias de compraventa de partidos que se ha saldado con sanciones de por vida a decenas de futbolistas, técnicos, directivos y árbitros, además de la retirada a un club, el Shanghái Shenhua, de una de sus ligas.
El viaje de Beckham incluye una visita al Estadio de los Trabajadores de Beijing, el mismo escenario en el que hace casi 10 años jugó su primer partido con la camiseta del Real Madrid.
En meses anteriores circularon rumores de que el exjugador del Manchester United y el Real Madrid, entre otros equipos, podría ser fichado por un club chino, aunque
La fortuna de Beckham, de 37 años,