La severa derrota que este miércoles padeció el Barcelona contra el Bayern Munich en el Camp Nou (0-3), que implicó su eliminación de la Liga de Campeones, fue la confirmación de que, durante esta temporada, el Barça no ha estado a la altura de sus rivales en los partidos importantes.
A pesar de haber sorteado las últimas rondas de la Liga de Campeones con éxito para alcanzar las semifinales, la trayectoria culé dista mucho del recorrido que trazó en las anteriores temporadas, en las que era incontestable hasta alcanzar el título (en dos ocasiones) o hasta la fase en la que quedaba eliminado.
Este año, en cambio, a excepción de algunos coletazos, como
En el primer examen, que puso al nuevo
En los siguientes pulsos de altura, se constató que la batalla entre Barça y Madrid de los últimos años ha empezado a cambiar de signo, especialmente desde el 5-0 en el Camp Nou de hace tres temporadas. En la Liga, el Barça no pudo con los madridistas en el Camp Nou (2-2) y en la semifinal de la Copa, la ida acabó con un 1-1 en el Bernabéu y con 1-3 en el Camp Nou.
El sexto y último clásico de la temporada,
Al margen de estos seis encuentros, en los seis partidos de talla en Europa (octavos, cuartos y semifinales de la Liga de Campeones), el equipo de Vilanova tampoco mejoró mucho.
Contra el PSG, un postrero gol de Pedro Rodríguez en el Camp Nou dio el pase a su equipo para cuartos, después de un agónico 2-2 en París y el 1-1 en la vuelta.
Los cuartos contra el Milan mostraron que el Barcelona, firme en la Liga, estaba empezando a tener problemas en Europa. A pesar de dominar en Milan,
En el Camp Nou, no obstante, el Barça vivió la mejor de sus noches esta temporada, con un 4-0 acompañado de un futbol de agrado por estar a la altura de las mejores actuaciones de otros años.
Con el nivel del futbol desplegado contra el Milan en el Camp Nou, el Barça viajó a Munich para medirse contra el que todos cantaban como el equipo en mejor forma en Europa. A pesar de que el Bayern marcó, como mínimo, dos goles muy discutidos,
En el último acto,
En la contienda, el Barcelona confirmó que por falta de intensidad, de fuerza, de estado físico o por carencia de mordiente de sus jugadores, su tránsito por Europa no iba a tener más recorrido que la vuelta contra un Bayern que reclamó por avanzado con un 0-3 el traspaso de poderes en Europa.
Así, tras doce partidos de máxima exigencia contra rivales con idénticos galones, el Barça solo ha sido capaz de llevarse dos, mientras que ha empatado cuatro y perdido seis.
Liquidada la 'Champions', ahora al Barça le quedan cinco encuentros de extrema exigencia, especialmente por el esfuerzo mental que deberá hacer para no perder la poca fuerza que aparentemente le queda para alcanzar una Liga en la que, a falta de 15 puntos por disputarse, tiene 11 de ventaja respecto al Madrid.