Para esta temporada, el equipo alemán St. Pauli planea apoyar a la comunidad homosexual al mostrar permanentemente la bandera de arcoíris (que simboliza el orgullo gay) en su estadio.
"El club ha estado activo desde hace muchos años ", dijo el vicepresidente del club, Gernot Stenger. "Con esta bandera damos esta señal altamente visible de que estas cuestiones tienen gran importancia en el St. Pauli y trabajamos duro en ellas".
Dirk Brullau, un miembro de los aficionados homosexuales del club, respaldó la iniciativa y dijo que sería un “avance significativo para el mundo del futbol” si un equipo de la Bundesliga hiciera lo mismo.
, juega en la segunda división de Alemania.
La medida ocurre menos de dos meses después de que el estadounidense en Estados Unidos.
Tras el anuncio de su homosexualidad en febrero, Rogers se retiró del futbol, pero regresó y firmó con Los Angeles Galaxy de la MLS, e hizo su debut a finales de mayo.
Jason Collins, un jugador profesional de basquetbol, anunció que era gay en abril.
“Las personas realmente crecen, aceptan y aman (...) Esas otras cosas simplemente no son tan importantes para ellos", dijo Rogers a principios de mayo. “Creo que a medida que los más jóvenes crecen y las generaciones van y vienen, creo que los tiempos se vuelven más tolerantes".
Por ahora, o de cualquier otra división de élite en Europa se ha declarado gay. Los jugadores alemanes Mario Gomez y Tim Wiese aparentemente tienen puntos de vista distintos sobre si deberían hacerlo.
Hace tres años, Gomez instó a los jugadores gay a revelar su orientación sexual.
Sin embargo, Wiese dijo que serían “destruidos” por “aficionados despiadados”, según The Guardian.
La canciller alemana Angela Merkel dijo el año pasado que los futbolistas gay no deberían preocuparse por revelar su sexualidad.
“Cualquiera que sume fuerza y valentía debería saber que viven en un país en el que no tienen nada que temer”, dijo Merkel.