Un triplete de Messi redondea la goleada del Barcelona sobre el Ajax

El Barcelona debutó con goleada en la Liga de Campeones 2013-14, al apabullar en el marcador al Ajax (4-0), no así en el juego, que volvió a ser poco vistoso, aunque fue letal en ocasiones, especialmente cuando volvió a aparecer Leo Messi, que, sin cuajar una gran actuación, se fue del choque con un nuevo triplete.

Partido grande en el Camp Nou, donde se citaban por primera vez en la historia los dos alumnos más aventajados de la escuela holandesa, con el Barcelona como anfitrión de un Ajax que salió a no arrugarse y a plantar cara al equipo catalán, como así sucedió desde el primer minuto, con los visitantes ahogando la salida del balón del rival y juntando las líneas para cerrar todo los huecos.

La apatía se fue apoderando poco a poco de un Barcelona que rápidamente empezó a recordar el de los últimos partidos, carente de ideas, de velocidad y de remate. 

A falta de lucidez, cuando el balón acababa en los dominios de Neymar, el brasileño intentaba alguna acción individual, pero sin concretarla. Así, en los minutos 3 y 5, el astro sudamericano participó en dos buenas acciones, con remate en la primera y cesión del balón en la segunda a un Cesc que envió el balón alto.

El Ajax, la viva imagen del Barça hasta medio campo, no dio ni un balón por perdido desde que lo ponía en jugo Vermeer desde su meta con el pie. Pero esta buena idea se diluía en el centro del campo, donde las pérdidas de balón se sucedían con frecuencia.

Después de que Vermeer tuviese una feliz intervención en una acción de Iniesta, en el minuto 22 una falta en la frontal a Messi fue ejecutada a la perfección por el argentino, que colocó el balón fuera del alcance del portero de Ajax, tocó en el palo y entró en la meta (1-0). 

El Ajax pudo haber neutralizado el marcador en el minuto siguiente, cuando Piqué se lanzó al suelo para desbaratar la acción, en el mejor ataque hasta entonces del equipo holandés.

El susto que sufrió el Barça no fue una anécdota, ya que el Ajax le tomó el número y empezó a dar sentido a su juego en el centro del campo, con llegadas más constantes y peligrosas a la meta de Valdés, como un centro de Bojan, a quien Mascherano le había cortado en las anteriores tres aproximaciones y el balón lo remató en plancha el lateral Van Rhijn, en una acción que el portero azulgrana resolvió con una gran intervención.

En el minuto 37, el Ajax pudo empatar de nuevo en otra aproximación de Bojan, con caída de Sigthórsson en un posible penalti y remate final de Duarte, al que volvió a responder con acierto Valdés.

El Barça, nuevamente, volvía a diluirse en un futbol sin chispa, sin que sus jugadores conectasen con el poderoso ataque para hilvanar acciones de peligro. 

Neymar en una acción en solitario y otra de Messi, cuando tenía un pase fácil a Cesc que no ofreció, cerraron las jugadas de peligro del Barcelona en el primer tiempo.

En el segundo acto, sin ningún cambio en el descanso, el Barça arrancó con algo más de garra y Van Rhijn sacó casi desde la línea de gol un balón que Alexis se disponía a rematar de cabeza. 

El Barcelona arrancó en un potente contragolpe que condujo Busquets, quien, tras hacer una diagonal, envió a Messi, que recortó a un defensa y marcó de un fuerte zurdazo (2-0) en el minuto 55. Otra vez Messi, con la rodilla, estuvo a punto de marcar en el minuto siguiente a pase de Neymar. 

El brasileño tuvo su opción en el minuto 23 en un remate de cabeza, tras un centro de Alexis, mientras que en otro ataque azulgrana Neymar lanzó un centro perfecto en el que Piqué conectó de cabeza a gol dentro del área (3-0).

El Barcelona, que no supo matar el partido contra el Sevilla con un 2-0 el pasado sábado, sí que entendió contra el Ajax que no iba a permitir ninguna opción al rival. Primero Piqué y otra vez Messi (4-0), después de que Alexis desperdició un gol cantado tras la jugada colectiva más bella de la noche, cerraron el partido. 

El broche a una segunda parte de nivel lo puso Valdés, al parar un penalti a Sigthórsson, después de una falta clara de Mascherano a Serero y de dos posteriores intervenciones de mérito.