¡Vendido al mejor postor!, la pugna por el 'mejor caballo de carreras'

Aunque la economía mundial sigue en recesión, en el centro británico del hipismo, un rincón de Newmarket, la pugna sigue.

Ha pasado casi un cuarto de milenio desde que Richard Tattersall fundó la casa de subastas de purasangres que lleva su nombre y, en 2013, el negocio prospera.

En octubre pasado se estableció un récord tras las puertas de los establos de Tattersalls Park: alguien pagó el mayor precio de la historia de Europa por un caballo: 8.4 millones de dólares (unos 100 millones de pesos) por la potranca hija de Galileo y Alluring Park.

Como muestra de respeto a sus antiguas raíces, todas las ventas son valuadas en guineas (una libra y un chelín), así que Joann al Thani, jeque de Qatar, desembolsó cinco millones de guineas a cambio del honor de comprar a esta prestigiosa yegua.

Sin embargo, crece la expectación en Tattersalls una vez más, ya que Frankel, que se retiró y ahora vive como semental , preñó a la yegua Dancing Rain e indudablemente posicionó al prospecto más codiciado en la subasta que inició el pasado 25 de noviembre y que durará dos semanas.

Dancing Rain ganó la carrera Oaks y su equivalente alemán. Han pasado más de 50 años desde que una cría de una ganadora de la Oaks es puesta a subasta pública.

El que se trate de un descendiente de Frankel —un caballo que cuenta con 14 victorias en la misma cantidad de carreras e indudablemente el más aclamado de su generación— aumenta las expectativas.

Jimmy George, director de mercadotecnia de Tattersalls, se opone a decir que espera romper un récord, pero seguramente habrá mucho dinero de por medio.

"Nunca esperamos superar una marca, por naturaleza son inesperados", dice George.

"Hay gran emoción por la venta de diciembre, ya que las yeguas llevan a los primeros potros de Frankel: hay en total unas 10 yeguas que tendrán potros de Frankel y de ellas, Dancing Rain fue la elegida. Eso será enorme".

"Es una de las mejores apareada con un animal único también. Si los combinamos, reduces las desventajas y es muy probable que tengas al mejor caballo de carreras. Se trata de una yegua muy valiosa en particular, ya que es muy difícil encontrar una de ese calibre en el mercado".

Otro caballo que pondrá a prueba el poder de compra de los agentes poderosos del hipismo es Immortal Verse —ganadora del Grupo 1 de la carrera Coronation Stakes en el Royal Ascot y del premio Jacques Le Marois en Deauville—, que espera a su primer potro, hijo de Dansili, que cuenta entre sus triunfos al Priex Messidor, al Prix Edmond Blanc y al Prix du Muguet , además de que ya tiene una impresionante trayectoria como semental.

"Además de Dancing Rain, Immortal Verse promete ser lo más sobresaliente de nuestra venta de diciembre", agregó George. "Una vez dicho eso, hay muchos caballos más".

De cierta forma, Tattersall es un mundo diferente que emplea a 45 personas de tiempo completo en Newmarket y a 20 más en su base irlandesa en Fairyhouse.

Aunque gran parte del mundo aún resiente los efectos de la crisis económica, este lugar a veces funge como el campo de juegos de los millonarios del mundo.

En total, se espera que haya representantes de 40 países en la pugna, pero no hay un agente solitario poderoso.

Los compradores británicos e irlandeses , especialmente J.P. McManus y John Magnier, son prominentes entre las figuras establecidas y nacientes de Medio Oriente, así como de la creciente cantidad de jugadores procedentes de la región.

Aunque hay un intercambio de una gran cantidad de dinero, el proceso de ventas en Tattersalls es notablemente simple.

Los caballos llegan a la preventa de Tattersalls en uno de los 850 establos que existen en el sitio de 19 hectáreas y allí se exhiben ante los posibles compradores antes de llevarlos al corral de ventas. Cuando llegan allí, comienza la subasta.

Conforme suben los precios, explica George, la venta se vuelve un "gran espectáculo".

Sin embargo, reconoce que "no es realmente asombroso. Hay algunas personas que asisten con la esperanza de presenciar el desarrollo del dramatismo y la emoción, pero la gran mayoría asiste en calidad de profesionales. Sin embargo, no hubo una sola persona que no quedara cautivada en el momento en el que la potra fue vendida por cinco millones de guineas".

Las ventas de cada año ascienden a unos 10,000 caballos, así que las utilidades son rápidas; en cuanto compran los caballos y llevan a cabo las revisiones veterinarias necesarias, los transportan a sus nuevos hogares.

Pero, ¿acaso un caballo puede llegar a valer realmente cinco millones de guineas?

En Tattersalls, donde todos ganan una comisión del 5% por cada venta, nadie lo dirá. Aunque hay caballos notables a subasta, también es posible encontrar grandes ofertas.

Treve, el caballo francés que ganó el Prix de l'Arc de Triomphe, fue vendido en otra casa de subastas por tan solo 50,000 libras esterlinas (aproximadamente un millón de pesos); fue una ganga si consideras su valor actual tras haber ganado el premio de 6,250,000 dólares (unos 81 millones pesos) en el clásico de Longchamp.

Por otro lado, los caballos no necesariamente están a la altura de su costo , lo que hace que este sea un negocio arriesgado, como un póquer de alto riesgo.

"Hay superestrellas que asombran en su primera presentación en público", dice George. "Esa es una de las cosas bellas. Nadie puede predecir el futuro, así que te llevas algunas sorpresas".

Una vez que los caballos son vendidos, la labor de Tattersalls termina y permanecen atentos a su progreso para determinar el futuro valor potencial y las ventas.

Tattersalls es el mejor cuando se trata de subastas de purasangres pero, como lo indica George, aún tienen que esforzarse.

"Somos los primeros del mundo y los mayores de Europa, pero tenemos que esforzarnos por mantener a la empresa en esa posición", dice. "Hay competencia y el día en que pensemos que no la hay, entonces estaremos en problemas".

"Por eso, tenemos que continuar con el esfuerzo, aprovechar nuestra historia y asegurarnos de cubrir todos los aspectos posibles".