El accidente de Schumacher reabre el debate sobre la seguridad en el esquí
El grave accidente de esquí de Michael Schumacher en los Alpes franceses de nuevo pone la atención en la seguridad al esquiar.
El siete veces campeón de la Fórmula Uno permanece en estado crítico después de golpearse la cabeza en una piedra en el resort Meribel en Francia el pasado domingo.
Pero de acuerdo con el médico Mike Langran, un médico escocés que se especializa en seguridad de esquí , los accidentes serios como el que tuvo el alemán no son comunes.
“Los accidentes de esta naturaleza son, afortunadamente, acontecimientos raros entre los esquiadores y personas que practican snowboarding, aunque por supuesto normalmente reciben atención mediática sustancial”, dijo Langran en un comunicado este lunes.
Langran, quien fue entrevistado por CNN sobre seguridad al esquiar en enero pasado, dijo que estaba “profundamente entristecido y preocupado” al escuchar sobre el accidente de Schumacher y le deseó una “pronta y completa recuperación”, pero enfatizó que el riesgo de lesiones en los deportes de nieve permanece muy bajo.
“Sin embargo, como con cualquier actividad recreativa, es imposible eliminar completamente todos los elementos de riesgo cuando se participa en deportes de nieve”, dijo Langran.
“El riesgo absoluto de una lesión mientras se esquía o hace snowboarding recreativamente permanece muy bajo, de entre dos y cuatro lesiones por cada 1,000 días en las pendientes.
“La gran mayoría de personas esquiará o hará snowboarding toda su vida sin tener una lesión significativa”.
Al comentar en enero sobre las lesiones y fatalidades en el esquí, Langran insistió en que los deportes de nieve tuvieron mala publicidad en lo que se refiere a percepciones sobre seguridad.
“Para los deportes de nieve, la tasa promedio de lesiones es de entre dos y tres por cada 1,000 participantes en cualquier día. Compara eso con un partido promedio de futbol o rugby donde quizá el mismo número, o más se lesionan y son un número más pequeño de jugadores”, dijo a CNN.
Langran añadió que en Estados Unidos en los últimos 10 años, en promedio, aproximadamente 41.5 personas murieron cada año por esquiar o hacer snowboarding.
“La tasa de mortalidad se convierte a 0.78 por cada millón de visitas de esquiadores/snowbarders. Aunque no es directamente compatible, en Estados Unidos en 2009, 2,400 personas se ahogaron mientras nadaban en áreas públicas y 800 murieron mientras montaban una bicicleta”, dijo Langran.
Schumacher es tratado por sus lesiones en el Centro Hospitalario de la Universidad de Grenoble en Francia.
En una conferencia de prensa este lunes, los médicos dijeron que era demasiado pronto para decir cuál podría ser el pronóstico del expiloto de F1.
Schumacher estaba en coma cuando llegó al hospital y necesitó una cirugía cerebral inmediata, dijeron los funcionarios. Se sometió a una operación y se mantiene en un coma inducido, añadieron los funcionarios.
Según reportes, el expiloto de 44 años portaba un casco cuando se cayó. Los médicos en el hospital Grenoble dijeron que sin la protección del casco, Schumacher no hubiera llegado a la mesa de operación.
“Siempre recomiendo a los esquiadores y snowboarders que se pongan un casco apropiado”, dijo Langran.
“Aunque nunca pueden ofrecer una protección completa en todas las situaciones de accidentes, no tengo duda de que el uso de un caso atenuará sustancialmente las lesiones que se tengan”.
La FIS (siglas en francés de Federación Internacional de Esquí) recomendó el uso de cascos en las pendientes desde 2006, pero su uso permanece voluntario.
Sin embargo, algunas aseguradoras de viajes, ahora insisten en que se porten o de otra forma, las reclamaciones de los esquiadores lesionados podrían ser inválidas.