Un grupo de aficionados de la selección nacional de Ghana fue agredido por fanáticos de Guinea Ecuatorial que les lanzaron petardos, durante la semifinal de la Copa Africana de Naciones, realizada este jueves.
Los hechos violentos registrados al final del partido llevaron a que los simpatizantes de
En los minutos finales del encuentro, y con un marcador favorable de 3-0 para Ghana, gracias a las anotaciones de Jordan Ayew, Wakasu Mubarak y Andre Ayew, el encuentro fue suspendido luego de que un grupo de afcionados saltara al campo de juego, buscando refugio tras los ataques recibidos.
Police helicopter hovers above the pitch with the
fans in real danger. It's now like a war zone.
— Ghana FA Official (@ghanafaofficial)
Los jugadores de ambos equipos fueron forzados a reunirse en la mitad del campo, mientras esperaban que las autoridades tomaran cartas en el asunto, y un helicóptero sobrevolara
El caos se hizo presente por la incertidumbre de cómo acabaría el juego o si sería suspendido, con reportes que sugerían que la policía escoltaría a los fanáticos de Ghana para que salieran a salvo del estadio.
Eventualmente, las autoridades decidieron que los últimos minutos del encuentro no se jugaran, con lo que Ghana avanza a la final para enfrentar a los elefantes de Costa de Marfil, el domingo.
Será la repetición del juego de campeonato de 1992, cuando los elefantes lograron la victoria.
Los problemas comenzaron desde antes de que concluyera el partido de este jueves, ya que los simpatizantes de Guinea Ecuatorial expresaron su frustración por la derrota, lanzando petardos a los jugadores de Ghana al medio tiempo, cuando ingresaron al túnel de los vestidores.
Fue una forma deprimente de terminar la participación de la nación que alberga la Copa Africana de Naciones.
Y es que el conjunto de Guinea Ecuatorial fue eliminado en la etapa de clasificación al torneo en julio de 2014, pero fue invitado a participar como nación anfitriona en noviembre pasado luego de que Marruecos decidiera no llevar a cabo el evento, por temor al brote de ébola.
La semifinal de este jueves representó para los simpatizantes de Guinea Ecuatorial una alegría, pero el desarrollo del juego frustró las esperanzas de ver a su equipo en la final, lo que provocó que la decepción se tradujera en actos violentos.
La gresca de este jueves deja una mancha en el torneo que merece una mejor actitud de sus aficionados.