Un prostíbulo hace oferta “verde”

Los visitantes de un prostíbulo en Berlín pueden obtener un descuento si llegan en bicicleta; residentes del lugar, donde la prostitución es legal, apoyan la idea porque protege el ambiente.
bicicleta, ciclista, (Foto: Jupiter Images)

Parte del barrio rojo de Berlín se está tiñendo de verde.

Un prostíbulo, en la esperanza de que no disminuya la demanda en la actual crisis económica, ha empezado a ofrecer descuentos a los clientes que llegan en bicicleta.

"Es muy difícil encontrar un estacionamiento cerca, y esta opción es mejor para nuestro medio ambiente", explicó Thomas Goetz, propietario del prostíbulo Maison d'Envie, o Casa del Deseo.

Los residentes de Prenzlauer Berg -un sector del antiguo Berlín Oriental que ahora tiene numerosas boutiques, restaurantes y clubes de moda- han apoyado fervorosamente al Partido Verde en las recientes elecciones y han saludado el ofrecimiento del prostíbulo para proteger el ambiente.

Los prostíbulos en la capital alemana, donde la prostitución es legal, han padecido por la crisis financiera mundial.

Los clientes se han tornado más frugales y vienen menos candidatos a la ciudad para conferencias y en viajes de negocios.

Pero Maison d'Envie ha presenciado una mejora desde que empezó a ofrecer el descuento de 5 euros (7.50 dólares) en julio, dijo Goetz.

Para recibirlo, los clientes deben mostrar a la recepcionista la llave de un candado de bicicleta o prueba de que han usado el transporte público para llegar. Eso reduce el precio por 45 minutos en una habitación de 70 a 65 euros.

Pero los que llegan a pie no tienen la misma suerte. "No hemos hallado la manera de que la gente demuestre que llegó caminando", adujo Goetz.

Otros prostíbulos han probado con diferentes incentivos para lidiar con la situación económica.

Uno ofreció una tasa fija para tiempo ilimitado antes de que las preocupaciones oficiales por los derechos de las prostitutas y por la higiene en el club le obligaran a rescindir la oferta.

Las 450,000 prostitutas que trabajan en Alemania -de ellas unas 10,000 en Berlín- gozan de los mismos derechos legales y beneficios sociales que otras profesiones y oficios.