Un grupo de académicos quiere medir la felicidad de los mexicanos con un nuevo índice de calidad de vida, que complemente las mediciones económicas y sociales más duras.
La privada Universidad de Monterrey (UDEM) dijo que trabaja en conjunto con la Cámara de Diputados del país para desarrollar el nuevo indicador, que sería difundido en enero o febrero del 2009.
"Los gobiernos se limitan a medir los indicadores objetivos como el Producto Interno Bruto (PIB), la inflación y el empleo, pero hacen falta otros para saber si realmente (...) están progresando", dijo José García, director de Estudios para el Bienestar de la UDEM.
El académico explicó que el Índice Nacional de Calidad de Vida podría ayudar al Gobierno a decidir la aplicación de recursos públicos, al medir niveles de satisfacción y carencia que sienten los mexicanos en temas como la seguridad, recreación, oferta de cultura y hasta la felicidad.
"Los gobiernos se enfocan mucho en hacer crecer el PIB y eso no necesariamente genera un mayor bienestar", agregó.
El indicador surge en un momento en que México experimenta un debilitamiento de su crecimiento económico. Se espera que este año la economía mexicana se expanda en sólo un 2.2%, frente al 3.3% del 2007, presionada por la desaceleración en Estados Unidos.
El catedrático aseguró que México sería uno de los pioneros en contar con un Índice de Calidad de Vida, aunque desde 1972 Bután, enclavado entre China e India, tiene el indicador de Felicidad Interna Bruta (FIB), que mide el desarrollo socioeconómico, la conservación del medio ambiente, la preservación de los valores culturales y el buen gobierno.