Amazonas contra el calentamiento global
El gobernador del mayor estado brasileño en el Amazonas autorizó una ley que busca atenuar el cambio climático y el calentamiento global en una región más extensa que el territorio combinado de Francia y España.
''La ley representa nuestro compromiso con la conservación y el desarrollo sustentable'', dijo el gobernador del estado de Amazonas, Eduardo Braga, en un comunicado difundido en la página del gobierno estatal en Internet.
El estado de Amazonas abarca un área de aproximadamente 1.58 millones de kilómetros cuadrados (632,000 millas cuadradas), de la cual más del 90% está ocupada por selva.
En Brasil se encuentra la mayor área natural tropical del mundo, el Amazonas, que cubre casi el 60% del país, aproximadamente 4.14 millones de kilómetros cuadrados (1.6 millones de millas cuadradas).
La mayoría de las emisiones de los así llamados gases de invernadero en Brasil provienen de la deforestación y quema de la selva del Amazonas, lo cual libera aproximadamente 370 millones de toneladas de estos gases a la atmósfera cada año -aproximadamente el 5% del total mundial-, según indican los científicos.
La nueva ley estatal del Amazonas -la primera en su tipo en Brasil- pide la creación de programas educativos para ayudar a concientizar a los estudiantes de los peligros del ''calentamiento global y el cambio climático, y de formas de disminuir su impacto''.
También establece un programa en el que se harán pagos periódicos a familias que ''reduzcan voluntariamente la deforestación y usen los recursos naturales de la región en forma sostenible''.
Además, la legislación ofrecerá estímulos fiscales a las compañías que promuevan el desarrollo sostenible y cuiden el medio ambiente.
La ley también pide el uso de ''fuentes de energía alternas y limpias'' y la instalación de equipo para reducir la emisión de gases de efecto invernadero.
Por otro lado, se instituirá un Fondo para el Cambio Climático con el fin de financiar programas de reforestación, de investigación y educativos, entre otros. El dinero para el fondo provendrá de las arcas estatales y de instituciones financieras nacionales e internacionales, según indica la nueva ley.
''Esta nueva ley es muy importante porque es la primera vez que se hace algo en Brasil para combatir el calentamiento global y el cambio climático'', dijo vía telefónica Paulo Adario, coordinador en el país de la campaña de Greenpeace en el Amazonas. ''Muestra una forma de lograr un desarrollo sustentable sin destruir la selva''.