Bolsas asiáticas caen ante certeza en EU
Los inversionistas dieron pocas esperanzas a que la Reserva Federal rescate a la economía mundial con un nuevo recorte de tasas de interés el miércoles y continuaron apostando a que este será un mal año, vendiendo acciones y dólares y comprando bonos soberanos.
Los inversionistas descuentan que la Fed anunciará un recorte de 50 puntos básicos en su tasa de referencia a alrededor de las 1915 GMT del miércoles, lo que sumaría presión sobre el dólar para dar un segundo impulso a la economía de Estados Unidos en 8 días.
Antes de que la Fed tome el centro de la escena, una primera estimación del producto interno bruto de Estados Unidos en el cuarto trimestre se conocerá a las 1330 GMT, estableciendo el humor de los mercados y dando pruebas acerca de si la mayor economía mundial eludirá la recesión.
Con un recorte ya descontado, los mercados de Asia volvieron a mostrar la preocupación de los inversionistas. El índice MSCI de acciones asiáticas no japonesas perdía más de un 2%.
El índice KOSPI de Seúl se hundió un 3%, alcanzando su peor nivel desde el 9 de mayo, arrastrado por las acciones de Hyundai Heavy Industries Co que cayeron casi un 11% por una disminución en sus pedidos.
"Los mercados no logran mantenerse al ritmo más firme que muestra Wall Street, mientras los inversionistas extranjeros siguen vendiendo las acciones locales", dijo Sung Jin-kyung, analista de Daishin Securities en Seúl.
"Pienso que la Fed recortará la tasa en medio punto porcentual esta vez, lo que dará alivio en el corto plazo. Pero otra vez, esto no va a cambiar fundamentalmente la visión de la economía de Estados Unidos", expresó Sung.
"Los datos macroeconómicos subsecuentes tendrán que mostrar que las medidas de estímulo económico también están teniendo buen impacto", concluyó.
En Japón, el referencial Nikkei cerró con una caída del 1% mientras que el referencial australiano S&P/ASX 200 perdió un 1.7%.
Con el dólar que se debilitaría por la decisión de la Fed, los precios del crudo treparon a un máximo de dos semanas por encima de los 92 dólares por barril, ayudados por las expectativas de que la OPEP mantendrá sin cambios los niveles de producción.
El oro al contado se negociaba a 922 dólares la onza, apenas por debajo de su reciente récord.
