El petróleo caía la mañana del martes a menos de 108 dólares el barril, porque informes iniciales mostraron que el huracán Gustav esquivó las instalaciones energéticas de Estados Unidos en el Golfo de México.
El crudo estadounidense perdía 7.88 dólares, 107.58 el barril, frente al cierre del viernes, tras haber retrocedido a un mínimo intradiario de 105.46 dólares, su nivel más bajo desde el 2 de abril.
La Bolsa Mercantil de Nueva York no operó en la víspera por un feriado público, por lo que no emitió un precio oficial de cierre para el crudo estadounidense.
El crudo Brent de Londres cedía 3.13 dólares, a 106.28 el barril.
Como Gustav perdió fuerza y se convirtió nuevamente en una tormenta tropical, el mercado se enfocaba en varios factores bajistas como la desaceleración de la economía mundial, el debilitamiento de la demanda petrolera y el avance del dólar estadounidense.
Estos ya habían estado presionando a los precios desde el récord de 147.27 dólares el barril alcanzado el 11 de julio.
El ciclón Gustav, junto con el conflicto entre Rusia y Georgia -que interrumpió el flujo de crudo y gas-, habían frenado la caída de los precios.
"Si no hubiese sido por esas amenazas ya habríamos desafiado (el nivel de) los 100 dólares", dijo Mike Wittner de Societe Generale.