Grecia rechaza abandonar al euro

El país negó los rumores del mercado sobre su posible salida de la zona euro; los operadores bursátiles dijeron que el euro alcanzó un máximo de sesión por estas versiones.
euro grecia zona salida ji.jpg (Foto: Jupiter Images)

Grecia desmintió categóricamente el miércoles los rumores de mercado que decían que estaba considerando dejar la Unión Europea o la zona euro.

"Negamos categóricamente toda idea de dejar la Unión Europea o la zona euro", afirmó el portavoz George Petalotis.

Operadores habían dicho que el euro alcanzó un máximo de sesión por la especulación de que Grecia analizaba dejar la UE.

Grecia utilizó los préstamos de emergencia de la UE y el FMI para

a 10 años que vencieron el miércoles.

Aunque el país tuvo un respiro, ahora debe convencer a los inversionistas de que es capaz de controlar su déficit público de manera que en algún momento pueda volver a obtener financiamiento en los mercados de capital.

Grecia aún enfrenta la enorme tarea de reducir su déficit desde casi un 14% del PIB a menos del 3.0% en el 2014. El PIB griego registraría una contracción del 4.0% este año, dificultando aún más el objetivo.

El Gobierno griego ha recortado los salarios del sector público y elevado los impuestos a cambio de la ayuda de la UE y el FMI, por lo cual ha arreciado el descontento popular, que ha derivado en masivas protestas.

El paquete de ayuda proporcionado por la UE y el FMI fue creado con el objetivo de que Grecia cumpliera con sus obligaciones de deuda, pero ¿qué sucedería si el país optara por el impago?

Los analistas estiman que podría verse obligado a dejar de utilizar el euro, y por tanto abandonar la zona euro, y volver a utilizar su moneda anterior, el dracma o una versión parecida.

Para Theodore Kariotis, profesor de economía en la Universidad de Maryland, abandonar el euro devolvería la política monetaria a manos del Gobierno griego.

Sin embargo, otros expertos advierten que Grecia podría sufrir una situación grave tras el impago, similar a la que experimentó Argentina en 2001.

Un informe de 2008 del FMI titulado The Costs of Sovereign Default (Los costos del impago soberano) muestra que, tras el impago, la mayoría de las economías tienden a contraerse por 1.2 puntos porcentuales cada año durante su reestructuración. Y con frecuencia hay consecuencias políticas, sociales y financieras más severas.

Con información de CNNMoney.com