Un dólar débil: ¿es bueno o malo?

La depreciación del billete verde, que puede acentuarse, es buena noticia para las multinacionales; por otro lado, si la caída se prolonga, puede llegar un desprestigio en la divisa.
dolar-billete-dinero-5-JI.jpg (Foto: Jupiter Images)

El dólar se ha hundido como una piedra en las últimas semanas. Con el euro a 1.41 dólares. Actualmenre ya nadie habla de paridad.

Hay una creciente preocupación en torno al

y la posibilidad de una , especialmente con China.

Y dado que

, los rendimientos de los bonos a largo plazo continuarán cayendo.

Todo ello podría suponer una presión para el dólar y alarmar a los principales acreedores del país, es decir, China y Japón, pues no querrán tener una deuda que ofrece a cambio tan poco.

¿Es el momento entonces de preocuparnos por un dólar anémico? Los inversores en el mercado accionario dicen que no. El mercado se ha movido al alza mientras el dólar se debilitaba frente a un puñado de las principales divisas, que incluyen al euro y al yen.

El razonamiento es que un dólar débil significa buenas noticias para

como IBM, Coca-Cola y McDonald's, pues conduciría a una mayor demanda en el exterior de bienes y servicios producidos en Estados Unidos, particularmente en los mercados emergentes como China e India.

¿Pero cuánto puede durar esa situación?

Varios expertos opinan que el dólar aún tiene espacio para caer más antes de que se convierta en un problema. Pero ese espacio no es tan grande.

"Aún no estamos en una zona de peligro. Sin embargo, el dólar se deprecia rápidamente, así que el momento para preocuparnos llegará antes de lo que piensa la gente" apunta Andrew Busch, estratega de divisas y políticas públicas en BMO Capital Markets. Busch indica que si el rendimiento de los bonos sigue cayendo y

, entonces es cuando el dólar estará en problemas.

Para Fred Fraenkel, vicepresidente de la firma de inversión Beacon Trust Company, se acerca la hora en la cual el vapuleado dólar perjudique más que beneficie a la economía y a los mercados.

"Por ahora, el impacto positivo que el dólar débil ha tenido en exportaciones y ganancias multinacionales ha sido superior al impacto de los que buscan otra moneda donde invertir sus reservas" señala, "pero cuando degradas tu moneda durante un largo periodo de tiempo, es negativo para tu reputación en el mundo y tu estatus como reserva de divisas. Ese es el mayor problema que puede venir después" agrega Fraenkel.

Degradar es un término fuerte, implica que hay un esfuerzo consciente por debilitar al dólar. Y en algunos aspectos, eso es justo lo que sucede.

La Reserva Federal claramente decidió dejar que el dólar cayera un poco más porque piensa que una nueva ronda de compra de bonos (como parte de una política de expansión monetaria cuantitativa o ‘quantitative easing') ayudaría a la economía a corto plazo.

El temor es que la Fed esté yendo demasiado lejos. Si el dólar se debilita demasiado, China y Japón podrían dejar de financiar la deuda estadounidense y otros países no encontrarían incentivos para invertir allí.

Pero el dólar todavía se encuentra 13% por encima del récord mínimo que tocó frente al euro hace dos años, así que aún no hay que entrar en pánico.