El índice de precios al consumidor de Estados Unidos subió un 0.1% en septiembre, por debajo de lo esperado, mostró este viernes un informe del Gobierno.
Los analistas consultados por Reuters esperaban un alza del 0.2%.
Si se excluyen los precios volátiles de los alimentos y la energía, la tasa de inflación permaneció plana por segundo mes consecutivo, frente a expectativas de un incremento del 0.1%.
A tasa anual, los precios generales también subieron menos de lo esperado.