El dólar, la divisa número uno: Sarkozy
El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, le aseguró este lunes a su par estadounidense, Barack Obama, que reconoce al dólar como la "divisa número uno" del mundo, mientras ambos líderes prometieron coordinar ideas para reformar el sistema económico internacional.
Sarkozy, que intenta posicionar las metas francesas en su rol de nuevo líder del Grupo de los 20 (G20), llegó a Washington con una agenda que incluye discutir el status del dólar como la principal divisa de reserva mundial.
Pero el mandatario francés buscó rápidamente calmar cualquier desacuerdo con sus anfitriones sobre el creciente desafío internacional al dominio del dólar, que ha sido apoyado por gigantes emergentes como China, pero que ha sumado poca adherencia en Washington.
"Siempre he sido un gran amigo, un tremendo amigo de Estados Unidos, y sé cuán importante es el rol que ocupa Estados Unidos en el mundo, y cuán importante es el dólar como la moneda número uno del mundo", comentó Sarkozy, sentado al lado de Obama tras una reunión entre ambos en la Casa Blanca.
Sarkozy no repitió explícitamente su llamado para comenzar a reducir la dependencia del dólar, hablando en cambio de manera más general sobre la necesidad de "ideas nuevas" para la economía global.
Obama, quien no mencionó al dólar en sus comentarios a los periodistas, estuvo de acuerdo con Sarkozy en la necesidad de situar a la economía global en una mayor estabilidad.
"Sigue habiendo muchos desequilibrios en la economía mundial que están inhibiendo las probabilidades de crecimiento", indicó Obama.
Las metas de Sarkozy
El mandatario francés quiere usar su presidencia del G20 durante el 2011 para comenzar con las reformas al sistema monetario global en momentos en que muchos países están tentados a dejar que se deprecien sus monedas para promover las exportaciones y el crecimiento, tras la peor recesión desde la Segunda Guerra Mundial.
París está presionando por esfuerzos internacionales para imponer una mayor transparencia en los mercados de materias primas y una regulación más dura del comercio de derivado en este sector.
El presidente de Francia, quien ocupó un rol clave en coordinar una respuesta europea en las primeras etapas de la crisis financiera, está entusiasmado en avanzar en su visión de que el rol global del dólar necesita ser reducido.
Sarkozy está tratando de conducir al G20 a la idea de un sistema monetario más diversificado, después de décadas en donde el dólar ha sido la principal moneda de reserva mundial.
