Strauss-Khan, el inquilino incómodo

Residentes de un edificio de Manhattan rechazaron que el acusado pasará ahí su arresto domiciliario; los habitantes se quejaron de las molestias que causaría la atención de la prensa.
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El exdirector gerente del

, Dominique Strauss-Kahn, no podrá pasar su arresto domiciliario en un lujoso edificio del noreste de Manhattan, luego que rechazaron que su esposa rentara dos departamentos.

Strauss-Kahn permanecerá en un edificio corporativo utilizado por la compañía de seguridad que contrató para vigilarlo como uno de los requisitos para que le fuera autorizada la libertad condicional.

Anne Sinclair, esposa del exdirigente del FMI había hecho los arreglos para rentar dos departamentos en el edificio Bristol, situado en el noreste de Manhattan, donde las rentas son de 14,000 dólares mensuales.

Al parecer, una de las razones por las que no fue aceptado Strauss-Kahn como inquilino fue la negativa expresada por otros residentes del edificio, ante las molestias que causaría la excesiva atención de los medios.

La víspera, el juez fijó una fianza por 1 millón de dólares pero exigió que Strauss-Kahn permanezca en confinamiento 24 horas bajo la vigilancia de un guardia pagado por el propio acusado, quien también deberá usar un brazalete en el tobillo para monitorearlo.

El ex funcionario está acusado de varios cargos, entre ellos,

intento de violación y abuso sexual, algunos de los cuales suponen penas de hasta 25 años de prisión cada uno.

Con información de Reuters