La inflación en Reino Unido se mantuvo en un máximo de dos años y medio ante una subida de los precios de los alimentos que compensó la caída en los costos de los viajes, lo que dio una pausa a la presión sobre la política monetaria del Banco de Inglaterra. La Oficina Nacional de Estadística dijo que los precios al consumidor subieron el 0.2% mensual para dejar el incremento interanual en el 4.5% como se preveía.
El Banco de Inglaterra prevé que la inflación en Reino Unido alcance el 5% este año.
Hubo poca reacción de los mercados dado que los inversionistas se aferraron a sus apuestas a un débil panorama económico que mantendría las tasas de interés en un mínimo histórico del 0.5% hasta fin de año.
"Todavía pensamos que el Banco de Inglaterra esperará para un alza", dijo Hetal Mehta de Daiwa Capital Markets.
La estabilidad del dato en mayo se produce después de un salto inesperadamente fuerte en abril por el aumento de los viajes con motivo de la Semana Santa y el día de vacaciones por la boda real.
La inflación subyacente cayó al 3.3% desde el récord del 3.7% en abril.
La inflación medida por los precios minoristas, que incluye más gastos inmobiliarios y sirve como referencia para muchos acuerdos salariales, también se mantuvo estable en 5.2%.
El objetivo de inflación del Banco de Inglaterra es del 2% y los precios se han mantenido por encima de ese nivel durante un año y medio.