El presidente de la Reserva Federal de St. Louis, James Bullard, dijo este jueves que si bien los efectos del programa de compra de bonos se hicieron sentir de inmediato en los mercados, su impacto sobre el conjunto de la economía se sentirá con un rezago de hasta un año.
"Se esperaría que los efectos del QE2 (sigla en inglés de la segunda ronda de alivio cuantitativo) estén rezagados por entre seis a 12 meses", afirmó Bullard en una conferencia.
Medir los efectos del programa sobre la economía es complicado por los choques experimentados a inicios del 2011, dijo. Las autoridades de la Fed han culpado a los problemas en la cadena de suministros tras el terremoto en Japón y a la crisis de deuda en Europa por haber desacelerado la recuperación estadounidense.
El programa de compra de bonos del Tesoro por 600,000 millones de dólares, que apuntó a reactivar la alicaída economía estadounidense, tuvo el mismo efecto sobre los mercados que una rebaja sustancial de la tasa de interés, consideró Bullard.