La economía de
fuertemente en el segundo trimestre, ante un débil crecimiento en Alemania y un estancamiento en Francia, tendencia que de mantenerse podría desarticular los esfuerzos para resolver la crisis de deuda. El Producto Interno Bruto (PIB) de la zona euro creció 0.2% en el segundo trimestre tras un alza de 0.8% en los primeros tres meses del año, informó este martes la agencia de estadísticas Eurostat.La desaceleración golpeó a las principales economías: Alemania, la locomotora de Europa, creció apenas 0.1% en cifras desestacionalizadas, su tasa más lenta en más de dos años y un freno significativo respecto de la expansión del 1.3% registrada en el primer trimestre.
Francia, en tanto, se estancó, según cifras conocidas la semana pasada que ponen a las dos mayores economías de la zona euro en la senda incorrecta.
El panorama también fue sombrío para las economías más endeudadas -sobre todo para Grecia, Italia, España, Portugal e Irlanda-, donde cifras que mostraron contracciones o un magro crecimiento ponen en duda el cumplimiento de las metas de reducción de sus déficits.
"Vemos una caída en los indicadores anticipados y eso significa que también vemos un crecimiento débil en el tercer trimestre", dijo Christoph Weil, economista de Commerzbank.
"Los países centrales tienen un crecimiento muy débil y eso podría ser un problema si la tendencia continúa", agregó.
España, uno de los países bajo ataque de los mercados, creció apenas 0.2%, reviviendo el temor a que la economía pueda caer en recesión.
Las cifras alejan aún más la posibilidad de que el Banco Central Europeo suba su tasa de interés.
Costó encontrar señales alentadoras en el informe. Solamente Austria revirtió la tendencia al crecer un 1.0%.
En términos interanuales, el PIB del bloque creció 1.7% en el segundo trimestre y 2.5% en el primer trimestre.
El crecimiento de Portugal, uno de los países rescatados financieramente por la zona euro, fue de cero, evitando una contracción solo gracias a un repunte de las exportaciones.