Euro, rechazado por un tercio en Francia
Más de uno de cada tres votantes franceses querría decirle adiós al euro y volver al franco, con una mayoría que ve a la moneda continental como una "desventaja" para la economía de su país, según un sondeo. El desencanto con la moneda común de la zona euro ha crecido en Francia y en otros países de la Unión Europea porque la crisis de deuda soberana europea y el alto precio del rescate de sus miembros más derrochadores han seguido asustando a los mercados financieros y planteando dudas sobre la capacidad de resistencia del euro.
Cerca del 36% de los votantes en Francia dijo que le gustaría salir de la zona euro y restablecer el franco, de acuerdo a la encuesta de Ipsos publicada el lunes en el diario Le Monde. El 60% dijo que Francia debe permanecer en el bloque de la moneda común.
"Desde la crisis, esto es algo bastante común. Esta idea está ganando terreno porque ahora hay 36% que nos dice que quieren que Francia salga del euro," dijo Vicente Dusseaux de Ipsos.
"Eso sigue siendo una opinión minoritaria, pero dentro de algunos subgrupos es la opinión de la mayoría", destacó.
La mayor parte de los votantes franceses que dijeron que querían una retirada del euro eran del Frente Nacional de extrema derecha, donde el restablecimiento del franco es una gran plataforma de los partidos.
La idea del retiro es apoyada por un porcentaje mayor entre los obreros respecto de los oficinistas, según la encuesta.
Abandonar el euro es una frase comúnmente escuchada en atribulados países de la zona euro como Grecia, donde el retorno a la moneda nacional y una devaluación ayudarían a contrarrestar un poco el dolor de las medidas de austeridad impuestas por los miembros del bloque.
El Ministerio de Finanzas de Francia ha advertido que la salida del euro sería un desastre para el país, y el diario Le Figaro citó a un economista del Banco ING en diciembre que estimó una reducción del 10% del Producto Interno Bruto durante tres años si Francia abandona la moneda común.
Una encuesta realizada en los Países Bajos en noviembre reveló que la mayoría de los holandeses creen que el país debería haberse quedado con el florín, su vieja moneda.
El mes pasado en Alemania, un sistema de llamadas a la red de televisión N-TV encontró que el 86% de la gente quería que Grecia abandonara la zona euro.
