ante la crisis económica global de 2008 y 2009 en comparación con los rubros de comercio y finanzas, dijo este martes el director de Perspectivas de Desarrollo del Banco Mundial (BM), Hans Timmer. Señaló que a diferencia de los sectores financiero o comercial que dirigen sus recursos a gobiernos o al sector privado, la ventaja de las remesas es que es una "manera muy efectiva de desarrollo" porque beneficia directamente al receptor.
Pese a los cuestionamientos de que las remesas podrían desincentivar el trabajo entre los beneficiarios, Timmer sostuvo que los recursos facilitan el acceso a servicios financieros ya que se utilizan para la educación que les permite mejores oportunidades laborales.
El funcionario participó en un foro para el lanzamiento oficial del libro titulado "Migración y remesas durante y más allá de la crisis financiera global".
En el foro participaron los coeditores de libro Dilip Ratha, gerente de la Unidad de Migración y Remesas del BM; Ibrahim Sirkeci, profesor de Estudios Transnacionales y Marketing en Regent's College de Londres, y Jeffrey Cohen, profesor Adjunto de Antropología de la Universidad Estatal de Ohio.
Los trabajadores migrantes enviarán 399,000 millones de dólares a sus países en 2012, en comparación con los 372,000 millones en 2011, lo cual demuestra que las remesas son el "enlace más tangible" entre la migración y el desarrollo, de acuerdo con el libro.
Indicó que la región de América Latina y el Caribe, cuyos migrantes se concentran en Estados Unidos, sufrió una drástica baja en los flujos durante la crisis financiera.
México,
, experimentó una caída considerable en los fondos provenientes de Estados Unidos y un impacto igualmente severo vivió El Salvador.Señaló que ambos casos subrayan el hecho de que muchas naciones de América Latina fueron vulnerables a los efectos de la crisis.
La crisis repercutió de manera particularmente intensa en los jóvenes urbanos de estos países, quienes en la actualidad enfrentan perspectivas laborales más difíciles y cada vez tienen menos oportunidades de emigrar, indicaron los coeditores.
Sirkeci sostuvo que la baja en las remesas a nivel global "no fue tanto como se temía" y que tampoco la crisis originó un regreso masivo de los migrantes.
Por su parte, Ratha señaló que el libro tiene como objetivo proporcionar información a las partes interesadas para que se desarrollen políticas que reduzcan los costos y mejoren el uso de la tecnología en la transferencia de dinero.