Chipre rechaza gravar ahorros bancarios
El Parlamento de Chipre rechazó este martes por una amplia mayoría un impopular impuesto a los depósitos bancarios, dejando en duda un rescate internacional al atribulado miembro de la zona euro necesario para evitar una cesación de pago y un colapso bancario.
La votación en el poder legislativo del pequeño país fue un duro revés para la zona euro de 17 miembros, después de que legisladores en Grecia, Portugal, Irlanda, España e Italia aceptaran impopulares medidas de austeridad en los últimos tres años para asegurarse la ayuda europea.
El Parlamento de 56 miembros rechazó la medida por 36 votos contra 19. Un legislador estuvo ausente. Este resultado dejó al país al borde del desastre financiero.
El impuesto es una condición para el rescate de 10,000 millones de euros (12,890 millones de dólares) de la Unión Europea a Chipre. Los países de la UE habían dicho antes de la votación que retendría la ayuda salvo que los depositantes de Chipre compartieran el costo del rescate.
El Banco Central Europeo había amenazado para terminar la asistencia de emergencia al sistema bancario chipriota. Tras la votación reafirmó el compromiso para proveer liquidez.
Pero una multitud en las afueras del Parlamento estalló en aplausos por el resultado de la votación y comenzó a cantar "Chipre le pertenece a su gente".
"Se escuchó la voz del pueblo", dijo Andreas Miltiadou, un pensionado de 65 años.
"Tengo la sensación de que esta cámara va a rechazar el proyecto", había dicho el presidente Nicos Anastasiades a los reporteros antes de la votación. Cuando le preguntaron el motivo, agregó: "porque ellos sienten y piensan que es injusto y que está en contra de los intereses de Chipre".
La exigencia europea del fin de semana, de que Chipre rompiera con la anterior práctica de la UE fijando un impuesto sobre los depósitos bancarios como parte de un rescate europeo, desató la ira de los chipriotas y una turbulencia en los mercados financieros europeos.
Anastasiades se rehusó a aceptar un impuesto de más de 10% a los depósitos superiores a 100,000 euros, lo que implicó gravar también a las cuentas menores. Eso perjudica a los ahorristas comunes, con depósitos que ellos creían que tenían una garantía estatal.
Ministro busca ayuda
El ministro de Finanzas de Chipre, Michael Sarris, viajó a Moscú el martes para buscar asistencia financiera de Rusia. El funcionario dijo a Reuters a través de un mensaje de texto que los reportes sobre su renuncia no eran verdaderos. Los rumores sobre la supuesta renuncia causaron inquietud en los mercados.
Sorprendidos por las reacciones y temiendo el rechazo del Parlamento chipriota, los ministros de Finanzas de la zona euro urgieron el lunes a Nicosia a evitar gravar las cuentas con menos de 100,000 euros y en cambio aplicar un impuesto más elevado a las cuentas más altas, que tampoco están protegidas por el sistema de garantías estatales.
La UE y el Fondo Monetario Internacional exigen que Chipre recaude 5,800 millones de euros para asegurarse el rescate, necesario para salvar al sector financiero de la isla.
Un proyecto de ley revisado visto por Reuters exime a las cuentas con menos de 20,000 euros del planeado recargo de 6.75% a los depósitos inferiores a los 100,000 euros. El gobierno no ha explicado cómo llenará la brecha de financiamiento que crearía esto.
El ministro de Finanzas de Francia, Pierre Moscovici, afirmó que la zona euro no prestará más fondos a Chipre porque si lo hiciera, la deuda sería inmanejable.
"Por encima de 10,000 millones de euros estamos entrando en una deuda de un tamaño que no es sostenible", dijo Moscovici a los periodistas en París.
Bruselas ha hecho hincapié en que la medida es un hecho extraordinario en un país que representa tan sólo el 0.2% de la producción europea, pero ha aumentado el temor a que los ahorristas en otros países europeos de mayor tamaño se pongan nerviosos y retiren sus depósitos bancarios.
El ministro de Finanzas holandés, Jeroen Dijsselbloem, quien lidera el grupo de ministros de Finanzas de la zona euro, dijo que no habría necesidad de imponer impuestos bancarios en otros países del bloque monetario.
En tanto, el presidente ejecutivo de Deutsche Bank, Anshu Jain, dijo en una conferencia del Bundesbank en Fráncfort: "Vemos que el peligro de contagio a corto plazo es limitado. No parece que esto vaya a ser un modelo para otros estados de la Unión Europea".
¿Y los fondos de Putin?
La directora gerente Christine Lagarde dijo el martes que el Fondo Monetario Internacional respalda los esfuerzos del gobierno chipriota para lograr lo que ella llamó "tasas más progresivas" en el impuesto a los depósitos.
Anastasiades sigue resistiéndose al impuesto a los depósitos mayores, muchos de ellos pertenecientes a extranjeros incluyendo rusos ricos, por temor sobre el modelo del negocio bancario de la isla y su reputación como refugio seguro.
Anastasiades pidió más ayuda de la UE a la canciller alemana, Angela Merkel, el lunes por la noche en una conversación telefónica.
Algunos chipriotas esperaban conseguir ayuda de Rusia, que rescató al pequeño país en el pasado. Muchos rusos mantienen su dinero en Chipre y operan sus empresas desde el territorio.
El portavoz del gobierno Christos Stylianides dijo que Anastasiades también podría hablar con Vladimir Putin, el presidente ruso, quien el lunes describió al impuesto como "injusto, poco profesional y peligroso".
Las autoridades rusas negaron rumores de que el Kremlin podría ofrecer más dinero, posiblemente a cambio de una futura participación en las reservas costas afuera de gas de Chipre, enormes pero todavía sin desarrollar, que incrementaron la importancia estratégica de la isla.
Fuertes ingresos de dinero ruso y el aumento de la influencia de Moscú desde el colapso de la Unión Soviética llevó a algunos funcionarios en Bruselas a quejarse en privado de que a veces Chipre actúa como un "Burro de Troya" en favor de Rusia dentro de la Unión Europea.
El fin de semana, los chipriotas vaciaron los cajeros automáticos, mientras que las instituciones seguirán cerradas el miércoles para evitar una corrida bancaria. La bolsa también suspendió sus operaciones por otros dos días.