Crecimiento económico, atado a reformas
La economía mexicana requerirá del apoyo de los sectores manufacturero, construcción, servicios financieros y comercio para lograr un crecimiento de 2.7% en 2013, pero su desempeño estará sujeto a la aprobación de las reformas fiscal y energética, además de la recuperación económica de Estados Unidos, advirtieron economistas.
Los expertos pronostican que en el segundo semestre la economía tenga un mejor desempeño que el observado en los dos primeros trimestres; al menos la expectativa es que se ejerza el presupuesto federal y que haya mayores señales de recuperación de la económica estadounidense.
"Eso definitivamente hará que el crecimiento en México presente una normalización en el segundo semestre, principalmente apoyado por factores internos que por eventos externos", dijo el director para América Latina de Moody´s Analytics, Alfredo Coutiño.
Este miércoles, el Banco de México (Banxico) recortó su estimación de crecimiento para la economía en este año, al dejarla en un rango de entre 2% y 3%. La cifra es inferior al pronóstico anterior de entre 4% y 3% y se ubica por debajo de la expectativa de 3.1% de la Secretaría de Hacienda.
Uno de los sectores del que se espera un mayor dinamismo ante la lentitud que se observó en la primera mitad del año, es el industrial (integrado por minería, petróleo; generación de gas y agua, manufacturas y construcción), comentó el economista en jefe de Scotiabank México, Mario Correa. Observa que en el segundo semestre habrá una corrección, especialmente en la construcción y un crecimiento en el sector servicios, que se ubican dentro de las actividades secundaria y terciaria, y que son las que mayor peso tienen dentro del Producto Interno Bruto (PIB).
De acuerdo con los últimos datos disponibles sobre la composición del PIB, el sector primario (que comprende las actividades agrícolas), tiene un peso de apenas 3.76% en el valor de la producción total del país; el secundario (servicios), contribuye con 34.32%, mientras que el terciario (industrial) tiene un peso de 60.11%, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
En los últimos seis años, la composición del PIB no se ha modificado; de hecho ha permanecido sin cambios prácticamente en más de dos décadas, según Coutiño, de Moody´s.
Esta composición explica que por la ausencia de un cambio estructural en el país y la falta de reformas que modifiquen la estructura de la economía mexicana el crecimiento haya sido bastante mediocre en los últimos años, indicó.
Los expertos mencionaron que la aprobación de las reformas generará expectativas positivas en el sector privado y que muchos de los proyectos que se han detenido podrían retomarse. El beneficio será mayor en la construcción (en el caso de aprobarse la reforma energética) y más créditos para financiar los proyectos, que sumado a los recursos que empiecen a canalizarse vía el Plan Nacional de Infraestructura apoyarán un mejor panorama para el corto plazo.
Sectores fuertes del PIB, a la baja
De acuerdo con los datos más recientes del INEGI, la manufactura y la construcción no han logrado superar el nivel que registraron antes de la crisis de 2008, ya que mientras al primer trimestre de 2007 mantuvieron un crecimiento de 2.3% y 5.5%, para el mismo periodo de 2013 observaron una caída de 1.6% y 2.3%, respectivamente.
Comercio, transporte y servicios financieros tampoco han remontado el nivel que observaron antes de la crisis.
En la medida en que se vayan concretando algunas de las perspectivas positivas por parte de las empresas en general, los sectores industrial y servicios deberían tener un buen desempeño, esto sin concretar todavía el tema de reformas, mencionó Mario Correa, de Scotiabank. El coordinador de Estudios Económicos de Banamex, Eduardo González, estimó que el crecimiento para 2013 será más bajo de lo previsto, ya que los riesgos se han incrementado.
