‘Holdouts’ buscan acuerdo con Argentina

Los tenedores descartan que el país deba suspender el pago a acreedores bajo reestructuración; el 30 de junio vence el pago de bonos de 900 mdd a inversores.
cristina fernandez

Inversores que tienen bonos impagos de Argentina, conocidos como holdouts, anunciaron este martes que discutirían un arreglo con el Gobierno de Cristina Fernández para que pague a otros acreedores y evite caer en una cesación de pagos, si es que las negociaciones para resolver la disputa legal avanzan antes del 30 de julio.

Abogados que representan a fondos de cobertura con deuda no reestructurada, liderados por Elliott Management de NML Capital Ltd y Aurelius Capital Management, indicaron en una carta al juez federal Thomas Griesa, quien lleva el caso, que no había motivos para acceder a un pedido de Argentina para suspender su decisión de que pague a los acreedores.

El lunes 30 de junio vence un pago por bonos de 900 millones de dólares (mdd) a inversores que participaron de dos reestructuraciones anteriores en 2005 y 2010. Argentina tiene un período de gracia de 30 días para realizar el pago antes de

.

"Si al acercarse el 30 de julio ambas partes han logrado buenos avances pero se necesita más tiempo, y Argentina no ha intentado evadir las órdenes modificadas del 23 de febrero, tanto Argentina como los demandantes tendrán una motivación para trabajar en un acuerdo consensuado, bajo condiciones favorables para ambos", afirmó Robert Cohen del bufete Dechert, representante legal de los fondos, en una carta a Griesa.

De acuerdo con Cohen, esto permitiría que el proceso de búsqueda de un acuerdo continúe y que Argentina pueda realizar el pago a acreedores dentro del período de gracia, al mismo tiempo que da a sus representados protección y una compensación por el riesgo de que fracase el esfuerzo de llegar a un acuerdo tras el pago.

la que obliga al país a cancelar su deuda con los holdouts al mismo tiempo que realiza el pago de su deuda reestructurada, o impide hacer pagos, lo que generaría un 'default' técnico, pese a que Buenos Aires tiene los fondos necesarios.

La decisión de Griesa se ratificó luego que la

por la deuda con los fondos de cobertura.

Los demandantes, que mantiene su disputa con Argentina en las cortes neoyorquinas, obtuvieron en 2012 un fallo a su favor por 1,330 millones de dólares. En la carta enviada a Griesa, dicen que, con los intereses acumulados, la cifra se elevaría a cerca de 1,650 millones de dólares al 30 de junio.

Argentina sostiene que si cancela la deuda a los tenedores de bonos impagos tendría que enfrentar reclamos por hasta 15,000 millones de dólares de otros acreedores no reestructurados.

La cifra representa más de la mitad de las reservas de divisas del gobierno argentino, que suman cerca de 28,500 millones de dólares.

Sin embargo, analistas privados dicen que la estimación de 15,000 millones de dólares es muy elevada.

Cerca del 93% de los acreedores, de unos 100,000 millones de dólares en bonos de deuda soberana que Argentina dejó de pagar entre 2001 y 2002, aceptaron la reestructuración por menos de un tercio del valor original de los bonos.