Diputados aprueban ayuda a Pemex
Las comisiones de Presupuesto y de Energía de la Cámara de Diputados aprobaron este viernes el dictamen que modifica las leyes de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria y de Deuda Pública, en el que se plantea que el Estado asuma los pasivos laborales de Petróleos Mexicanos (Pemex) y de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
El documento sólo se aprobó en lo general —por 43 votos contra 17— porque las bancadas acordaron que la discusión de las reservas se envíe directamente al pleno de San Lázaro , como ha ocurrido con los otros dictámenes en materia energética.
La modificación establece que las deudas de Pemex y CFE en el ámbito laboral dejen de ser de las empresas y se conviertan en deuda pública. En conjunto, estos pasivos ascienden a alrededor de 1.6 billones de pesos (1.1 billones de Pemex y 507,000 millones de CFE).
El cambio es impulsado por el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) y por el opositor Partido Acción Nacional (PAN).
Ambas fuerzas políticas argumentan que la medida es necesaria para que ambas instituciones estén en mejores condiciones de competir frente a las compañías privadas, a las cuales abre el paso la reforma constitucional en la materia promulgada en diciembre de 2013.
El panista Rubén Camarillo, secretario de la Comisión de Energía, dijo al respecto que con esto se busca quitar a Pemex y a la CFE un "lastre".
Sin embargo, los partidos de izquierda de la Revolución Democrática (PRD), del Trabajo (PT) y Movimiento Ciudadano consideran que la medida equivale a un "rescate" pagado con recursos públicos.
Incluso, compararon el caso con los rescates que el Estado hizo de los bancos y del sistema carretero, cuando estaban en control de particulares en la década de 1990.
"(Quieren seguirle cargando pasivos al pueblo de México. (…) Nosotros no vamos a acompañaros en este robo", dijo Ricardo Mejía Berdeja, vicecoordinador de Movimiento Ciudadano en la Cámara baja.
Al respecto, diputados del PRI y del PAN negaron que exista tal rescate estatal, argumentando que las deudas de Pemex y de la CFE ya pueden considerarse públicas porque ambas instituciones pertenecen al Estado.
El analista Héctor Villarreal, del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), coincidió en este punto de vista. En entrevista este viernes, dijo que la medida implicaría que los pasivos dejen de contabilizarse como endeudamiento de las empresas y se incluyan en los libros del Estado.
"El pasivo laboral de Pemex ya era asumido por el Estado, en particular lo que tiene que ver con las pensiones", señaló.
La primera consecuencia de esto será que aumentará la deuda total del país —que hasta ahora no comprende la correspondiente a Pemex ni a la CFE—, lo que podría influir en la nota que las calificadoras dan a México y en el flujo de inversiones.
"Un poco el detalle es en qué cuenta reconozco el pasivo. (...) A pesar de que para todo efecto práctico ya era un pasivo del Gobierno mexicano, no sé cómo reaccionen las calificadoras ahora ante la idea, si metes también CFE. Una deuda de 10 puntos más del PIB no es trivial", dijo Villarreal.
Priistas y panistas dijeron además que el cambio en los pasivos laborales dependerá de que las empresas y sus sindicatos hagan cambios a los contratos colectivos de trabajo, con beneficios menores para los nuevos empleados.
En días pasados, las comisiones aprobaron otros cuatro dictámenes con minutas enviadas por el Senado, con las leyes de Hidrocarburos, Industria Eléctrica, Pemex y la CFE, y órganos reguladores del sector.
Ambos paquetes —el fiscal y el enviado por el Senado— se discutirán a partir del lunes en el pleno de San Lázaro.
