La Corte Federal de Cuentas de Brasil rechazó este miércoles el manejo de las cuentas del año pasado del gobierno de la presidenta Dilma Rousseff, allanado el camino para un potencial juicio político a la asediada mandataria.
En una votación unánime, la corte -conocida como TCU- dictaminó que Rousseff cometió
Es la primera vez que el organismo rechaza las cuentas de un jefe de Estado en casi 80 años.
Aunque la decisión no es legalmente vinculante,
Para Rousseff es el segundo golpe que sufre en el día, luego que no consiguió apoyo suficiente en el Congreso para sus esfuerzos por equilibrar el sobregirado presupuesto fiscal.
El resultado destaca el aislamiento político en que se encuentra la presidenta brasileña en medio del peor escándalo de corrupción en la historia del país y la recesión más grave en 25 años.