Tasas bajas en Estados Unidos, un riesgo para México
La espera de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) para elevar su tasa de interés empieza a preocupar a algunos analistas sobre los efectos que esto pueda tener en la economía de mercados emergentes, particularmente en México.
El no incrementar la tasa de interés refleja un aletargado crecimiento económico en Estados Unidos , el principal motor de la economía mundial y el mayor socio comercial de México.
La Fed ha mantenido su tasa de interés en niveles históricamente bajos desde finales de 2008, cuando estalló la crisis económica mundial que se gestó en el sector inmobiliario de ese país, además de haber inyectado poco más de 3.5 billones dólares en el mercado de deuda con el fin de impulsar el crecimiento.
“Cuando la Fed no subía la tasa, el mercado tenía una reacción positiva. Esto porque hay menos interés en el dólar y una expectativa implícita de que las tasas bajas generan crecimiento económico y será positivo para los emergentes. El problema sería si hay un cambio en esta correlación y los mercados ya no ven tan positivo que no suba tasas, porque significa que no hay crecimiento”, advierte el director de estrategias de mercados de Finamex Casa de Bolsa, Guillermo Aboumrad.
En mayo la producción industrial de Estados Unidos cayó 1.40% anual, con lo que hiló nueve meses a la baja. El industrial es un sector estrechamente ligado con el de México ya que de este dependen 83% de las exportaciones manufactureras mexicanas.
Hasta ahora el consumo privado ha sido el que ha impulsado a la economía nacional, mientras que el sector externo parece desacelerarse. De enero a abril las exportaciones manufactureras acumulan una caída de 4.3% anual, mientras que en el mismo lapso de 2015 crecieron 5.3%, de acuerdo con cifras del INEGI.
En la última minuta de la reunión de política monetaria del Banco de México , la mayoría de los miembros de la junta de gobierno destacó que entre los riesgos a la baja está una mayor desaceleración de la demanda externa.
Por su parte, el economista en jefe de Barclays México, Marco Oviedo, comentó que el país más afectado por la incertidumbre del alza de la tasa de interés de la Fed es México debido a su dependencia con Estados Unidos.
“La política monetaria ya llegó a un límite y lo mejor que pueden hacer los bancos centrales es quedarse ahí por un tiempo prolongado, como lo está haciendo la Reserva Federal”, dice Oviedo, quien espera que el banco central estadounidense aumente el precio del dinero hasta septiembre.
Por lo pronto, la Organización Mundial del Comercio prevé que el volumen del comercio mundial siga creciendo a un ritmo lento en 2016, con un avance de 2.8%, la misma tasa de 2015, ante un descenso de las importaciones de los países desarrollados.
“Mucho del crecimiento de emergentes está basado en el comercio mundial y el Brexit y el proteccionismo del discurso Donald Trump coinciden en un momento en que el comercio se estancó (…) Si se desacelera no nos va a ir muy bien”, agregó Aboumrad, que hasta ahora mantiene un pronóstico de crecimiento de 2.4% para la economía de México.