ProMéxico aplaude austeridad pero defiende oficinas en el extranjero
ProMéxico ha demostrado con resultados, ser productivo, que atrae inversiones, promueve el comercio exterior y fortalece la economía mexicana, aseguró Paulo Carreño King, director general del organismo.
Entrevistado en el programa de televisión de Expansión, Carreño King afirmó que “la génesis de ProMéxico es construir y fortalecer las cadenas de valor en industrias estratégicas como la automotriz, aeroespacial, agricultura (…) ProMéxico no sólo atrae dinero y promueve exportaciones; es una agencia que construye y contribuye a fortalecer un modelo económico”.
El funcionario puntualizó que la Inversión Extranjera Directa de México, por primera vez, rebasará los 200,000 millones de dólares durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, cantidad mayor a lo que cualquier otra administración Federal ha logrado atraer y de esa, 40% fue gestionada por el organismo promotor.
“Aplaudimos las medidas de austeridad del próximo gobierno federal, que empezará el próximo 1 de diciembre, pero se debe utilizar la plataforma de ProMéxico”
“Hay que aprovechar lo que ya hay, y lo que hay es la estructura de ProMéxico con sus 46 oficinas fuera del país, que funcionan de una manera muy austera y dan resultados”, dijo en el programa transmitido este jueves por ADN40.
Carrillo King, expresó que no hay un solo país moderno, abierto al mundo como está México que no tenga una agencia comercial como ProMéxico.
Comentó que le tocará al próximo gobierno federal definir cuál será la política en materia de inversiones, comercio y promoción de exportaciones, “pero con la misma visión y la misma dinámica de llegar más lejos”.
El funcionario enfatizó que ProMéxico empujó una estrategia para la diversificación de mercados, la cual se ha hecho con éxito, pues las exportaciones han crecido de manera significativa.
“En Asia, África y Europa se logró un crecimiento de más de 192%, más de 100% y 34%, respectivamente, durante la presente administración”.
Agregó, que en materia de inversión extranjera, la dependencia con Estados Unidos y Canadá bajó de 50% a 38%, pero sin tener una reducción en los montos finales.
